Rusia, uno de los países que apoya la presidencia de Nicolás Maduro, se ofreció para mediar en la crisis generada en el gobierno de Venezuela, generada a partir de la asunción del segundo mandato del líder chavista, el 10 de enero último, que no fue legitimado por la oposición venezolana ni gran parte de la comunidad internacional.
“Hemos declarado que si se requiere nuestra mediación, estamos preparados para ello”, expresó a la agencia de noticias rusa Sputnik el director del Departamento del Ministerio de Exteriores para América Latina, Alexander Schetinin.
Schetinin aseguró que Rusia está dispuesta a colaborar con todas las fuerzas políticas de Venezuela. “Son ellos quienes deben resolver la crisis, con los procedimientos constitucionales y de modo pacífico”, subrayó.
El diplomático ruso indicó que no mantuvo contactos ni está previsto que los haya con Juan Guaidó, el titular de la Asamblea Nacional de Venezuela, que esta semana asumió la presidencia interina del país.
Schetinin destacó que la “gran mayoría de actores regionales” haya rechazado una intervención militar en Venezuela, “independientemente de su postura respecto al gobierno de Maduro”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, habló ayer por teléfono con Maduro, a quien le expresó su “apoyo a las autoridades legítimas de Venezuela, ante la escalada de la crisis política interna provocada desde el exterior”, según indicó el Kremlin. Además, llamó a “superar las discrepancias en la sociedad de Venezuela a través del diálogo político”.
Además del de Rusia, Maduro recibió ayer el apoyo de China, Turquía y México.
