Cristina Kirchner resolvió viajar anoche a Cuba como estaba previsto, tras el fallecimiento de su madre Ofelia Wilhelm, para encontrarse con su hija Florencia, quien se encuentra en la isla por un tratamiento médico.
Si bien en el hospital privado hubo un total hermetismo, desde el entorno íntimo de Wilhelm informaron que al nosocomio se acercaron los familiares más cercanos, entre ellos, la ex presidenta de la Nación, por lo que se desplegó un fuerte operativo de seguridad en los alrededores.
La senadora tenía programado el viaje a Cuba para visitar a su hija Florencia, quien se encuentra allí por prescripción médica, y volvería al país en 10 días. Ante la noticia del deceso, desde su entorno explicaron que la senadora decidió no suspender el viaje, ya que está “muy preocupada por la salud de su hija”.
La ex presidenta abordó el vuelo previsto para las 0.50 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza rumbo a La Habana, luego de visitar el lugar en el que falleció su mamá, el hospital ubicado en avenida 51 entre 29 y 30, al que Cristina asistió varias veces durante la internación de Ofelia.
Si bien era reconocida por su parentesco con Cristina, Wilhelm tuvo una larga trayectoria local como dirigente gremial, en el sindicato AERI (Asociación de Empleados de Rentas e Inmobiliarios), y como dirigente peronista.