El empresario Cristóbal López pasó la noche en el penal de Ezeiza, en tanto su socio en el Grupo Indalo, Fabián de Sousa, lo hizo en el penal de Marcos Paz, tras haberse entregado ambos ayer ante la justicia, poco después de conocerse el fallo de la Cámara Federal de Casación Penal que dispuso sus detenciones.
Ayer, el tribunal tomó la decisión en el marco de la causa en la que se los investiga por no haberle rendido a la AFIP 8 mil millones de pesos que habían recaudado con el impuesto a la transferencia de combustibles.
Los empresarios habían sido detenidos el 20 de diciembre pasado por orden del juez federal Julián Ercolini.
En marzo, la Cámara Federal porteña dispuso que se les otorgara la excarcelación por considerar que esa medida no ponía en riesgo la investigación contra el Grupo Indalo, pero el jueves, el fiscal general ante la Cámara Federal de Casación penal, Raúl Plee, solicitó que se revoque la medida y que los empresarios sean detenidos nuevamente.
La decisión de la sala I del máximo tribunal penal fue tomada por mayoría con los votos de los jueces Gustavo Hornos y Eduardo Riggi, mientras la camaristas Ana María Figueroa votó en disidencia.
En un fallo de 148 páginas, los jueces dispusieron que los empresarios y el ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray vuelvan a ser investigados por “defraudación al Estado” y no por “apropiación indebida de recursos”, contra lo que había decidido la Cámara Federal.