El secretario general de la Asociación Bancaria y de la Corriente Federal de Trabajadores (CFT), Sergio Palazzo aseguró que la conducción de la CGT se encuentra dividida.
“Ya está dividida la CGT, está claro, porque hoy, en los hechos, no hay unidad”, afirmó, en declaraciones radiales.
El dirigente gremial, que por estos días negocia las paritarias del sector, cuestionó la actitud del Consejo directivo de la central sindical, que no convocó a a una movilización contra la llamada “reforma previsional”, sancionada el martes pasado en el Congreso.
La jornada de ese día marcó una manifiesta división dentro de la CGT, entre los gremios que exigían una reacción más decidida y contundente contra la modificación de la fórmula de movilidad y los que no adhirieron al paro ni a las medidas anunciadas por la central.
“La CGT expresa su rechazo total a cualquier forma de cambio de la liquidación de haberes jubilatorios que trajera consecuencias negativas. Si tenés esa posición, ese día, mínimo, tenés que estar en la calle y fue un paro sin movilización“, reclamó Palazzo.
“No estoy de acuerdo ni con la modalidad del paro ni con que no haya movilizado la CGT porque si la medida la iban a lanzar al mediodía, como mínimo tenía que tener una movilización”, agregó el dirigente de La Bancaria, uno de los gremios que adhirió a la medida de fuerza el martes 19 hasta el mediodía.
Paritarias
La Asociación Bancaria rechazó el incremento salarial de 9 por ciento anual ofrecido para el año que viene por las cámaras del sector, con una actualización mensual por inflación.
“Si el índice de precios supera ese porcentaje, nos parten el acuerdo en veinte pedacitos porque nosotros venimos percibiendo el aumento en una sola cuota”, sostuvo Sergio Palazzo.
“El otro día se hizo la primera reunión, después de una medida de fuerza que tomamos, y en tiempo récord nos pusieron una conciliación obligatoria”, reclamó al Ministerio de Trabajo.
De filiación radical, Palazzo opinó que el ex presidente Raúl Alfonsín no hubiera apoyado la alianza con el PRO. “Nunca hubiera apoyado esta adhesión del radicalismo a la derecha”, aseguró. “Hay una parte que está con Macri y una gama de radicales no escuchados, producto de que muchas veces se silencia la opinión de los críticos dentro del partido”, se quejó.
(Con información de Télam)
