Una jornada de violencia fue la que se vivió hoy en Brasil, en medio de masivas manifestaciones contra el presidente Michel Temer.
Las protestas se repitieron a lo largo y ancho del territorio brasileño. En Brasilia es donde se vivieron las imágenes más crudas, en donde los manifestantes que reclamaban la renuncia de Temer prendieron fuego las instalaciones de tres ministerios, en particular el de Agricultura. La policía, por su parte, respondió con gases lacrimógenos. Se conoció que una persona resultó herida producto de un disparo de arma de fuego.
Las protestas, convocadas por los sindicatos y organizaciones sociales terminaron con barricadas de fuego, adjudicadas a integrantes del grupo anarquista Black Block. En las oficinas del Gobierno, los trabajadores debieron ser evacuados. Rio de Janeiro no fue la excepción a las concentraciones anti Temer, y allí también se repitieron los incidentes.
Policia lanza gases a manifestantes frente al Congreso de Brasil.
Piden salida de presidente Temer pic.twitter.com/5ZoeOtKbBP— DcW (@DCWroclaw) May 24, 2017
En este contexto, Temer redobló su apuesta, y convocó al Ejército para que retome el control de las calles. La medida no estuvo exenta de fuertes críticas en la Cámara de Diputados brasileña.
“El acto iba a ser pacífico, pero degeneró en violencia, vandalismo y falta de respeto, agresiones al patrimonio público y amenazas a personas, muchas de ellas funcionarios que se encuentran aterrorizados”, señaló el ministro de Defensa para argumentar el envío de tropas a las calles.
Hoy, además, Temer sufrió una nueva baja en su Gobierno, con la renuncia del asesor presidencial Sandro Mabel, dirigente del Partido del Movimiento de la Democracia del Brasil (PMDB).