Que la historia de una banda o de un músico llegue a la pantalla grande repercute en más ventas y beneficios para las discográficas. La conclusión se desprende de lo que ocurrido en los últimos meses con los éxitos en el cine de Queen y Elton John, gracias a los filmes “Bohemian Rhapsody” y “Rocketman”.
Según un informe publicado la semana pasada por Nielsen Music, Queen resultó ampliamente beneficiada gracias a “Bohemian Rhapsody”, la producción protagonizada por Rami Malek. La banda vendió más discos en Estados Unidos más que en ninguna otra parte del mundo durante el primer semestre de este año. En total, el reporte indicó que la banda de Freddie Mercury vendió 731.000 álbumes y tuvo más de 1,3 millones de descargas en las plataformas de reproducción.
Por su parte, Elton John vio cómo las ventas se multiplicaron gracias a “Rocketman”, la película que repasa su vida. De acuerdo con el mismo informe, la compra de discos del artista británico creció 138 por ciento tras el estreno del filme.
Queen, además, tuvo un empujón extra: la interpretación en vivo de los hits “We will rock you” y “We are the champions” durante la última ceremonia de entrega de los premios Oscar. La misma gala también disparó las descargas de la canción “Shallow”, incluida en la banda sonora de la exitosa película “A star is born”. La interpretación de este tema por parte de Lady Gaga y Bradley Cooper también impulsó las descargas digitales, que sumaron más de 648.000.
De esta forma, tal vez lo que comenzó con dos películas, se traduzca, de acá en más, en una asociación (discográficas más Hollywood) cada vez más frecuente.