Las grandes plataformas de streaming tiene mucho contenido, aunque la calidad de las series y películas no resulta difícilmente pueda ser homogénea. Por eso, en esta cuarentena, son bienvenidas las iniciativas que realizan una especie de curaduría acerca de lo que se ofrece para mirar. Este es el caso del Instituto Goethe, que habilitó, hasta el 30 de junio, la visualización de diez películas, incluidas en los últimos ciclos de cine de la institución y que forman parte de su vasta filmoteca.
Mediante un link en su web se puede acceder a cintas como Tarde y El camino soñado (Der traumhafte Weg), de Angela Schanelec, o el documental Parabeton – Pier Luigi Nervi and Roman Concrete (Parabeton – Pier Luigi Nervi und römischer Beton), de Heinz Emigholz.
También figura en el catálogo Music & Apocalypse (Weitermachen Sanssouci), de Max Linz, que se pudo ver el Bafici de 2019; Los 120 días de Bottrop, de Christoph Schlingensief, y El Capitán (Der Hauptmann), de Robert Schwentke,
Otros títulos disponibles son El marco invisible (The Invisible Frame), de Cynthia Beatt; El largo verano de la teoría (Der lange Sommer der Theorie), de Irene von Alberti; Porque soy más bella (Weil ich schöner bin), Frieder Schlaich, y El viaje de Naomi (Naomis Reise), de Frieder Schlaich.
Mirá a continuación la sinopsis de las películas:
Tarde (Nachmitag)
Angela Schanelec, color, 97 min, 2007
En esta película, todo lo que pasa frente a la cámara es importante, pero lo que pasa fuera de cuadro también lo es. Un aparente día cualquiera en una casa de verano idílica junto al lago hace que se desvele todo lo que nunca se dice en una familia. La fatiga, el tedio, el fastidio, el calor, el silencio, la dinámica familiar, el reproche y la frustración son los acicates para que unos personajes aparentemente aletargados den rienda suelta a sus emociones contenidas.
“Que el origen del film sea teatral (proviene de La gaviota de Antón Chéjov) poco influye en la puesta en escena. Schanelec tiene una precisión quirúrgica para saber la duración de cada plano y una elegancia heterodoxa para situar a los personajes en el cuadro. Otra hermosa evidencia de su virtuosismo no exhibicionista consiste en seguir las transiciones de un plano a otro. Es una cineasta mayor, siempre discreta y lúcida”. (Roger Koza)
El camino soñado (Der Traumhafte Weg)
Angela Schanelec, color, 81 min., 2016.
Luego de un comienzo con una serie de imágenes que revelan a una pareja bohemia durante una caminata en la Grecia de los años 80, la mujer es rápidamente descartada por la historia y seguimos al hombre, mientras viaja a Inglaterra a ver a su madre enferma. La película se concentra en su dolor y su desgracia, pero luego la narración vuelve a saltar en el tiempo y en el espacio: se deja al hombre y se retoma a la mujer, pero en 1989. Luego saltamos una vez más a la capital de Alemania en el presente, esta vez enfocándonos en una nueva mujer, una actriz cuyo matrimonio se está viniendo abajo y cuyo hijo la ayuda a ahuyentar su tambaleante estado existencial con su generosidad y su espíritu. Hecha a base de bucles narrativos opacos de una precisión bella y exquisita, la película separa parejas, separa gente y separa el tiempo y el espacio, todo de forma sugestiva, y manda a cada uno de ellos al mundo para vivir, cambiar y separarse nuevamente bajo las presiones inadvertidas de la sociedad. (Daniel Kasman, catálogo del 31° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata).
Music & Apocalypse (Weitermachen Sanssouci)
Max Linz, 80 min, 2019.
El Instituto de Investigación en Cibernética (especializado en realidad virtual y simulaciones) está en plena crisis presupuestaria que puede desembocar en su cierre. Para seducir a quienes podrían aprobar el apoyo financiero necesario para la continuidad, los responsables del centro deberán apelar a las más diversas y por momentos grotescas estrategias.
Nuevas tecnologías, burocracia, académicos presuntuosos, corrección política, miserias universitarias (del Primer Mundo, claro), comedia negra, segmentos musicales y… una tortuga. Un film satírico que habla de temas importantes de la forma más impertinente que pueda imaginarse con resultados generalmente convincentes. (Otroscines.com)
Los 120 días de Bottrof, la última película del nuevo cine alemán (Die 120 Tage Von Bottrop)
Christoph Schlingensief, color, 60 min, 1997.
A lo largo de dos décadas, Christoph Schlingensief imprimió su sello al discurso cultural y político en Alemania. Su noveno largometraje, Los 120 días de Bottrop, es un homenaje y un canto del cisne a Fassbinder, a la vez que asesta un duro golpe al arte cinematográfico alemán.
Los sobrevivientes del elenco de Fassbinder se encuentran una vez más para rodar, en esa gran obra en construcción que fue el Potsdamer Platz, la última película del Nuevo Cine Alemán, una remake de Los 120 días de Sodoma de Pasolini. Todo sale mal: el cineasta Schlingensief es rebajado a la categoría de asistente de producción y reemplazado por un tal Sönke Buckmann, al que la famosa actriz Katja Riemann no vacila en entregarle el Premio del Cine Alemán. El cine como pesadilla, o a la inversa.
El capitán (Der hauptmann)
Robert Schwentke, b&n, 118 min, 2017.
En los últimos momentos de la II Guerra Mundial, en plena caída del III Reich, Willi Herold, un soldado desertor de 19 años, andrajoso y hambriento, encuentra el uniforme de un capitán nazi. Haciéndose pasar por un oficial, Herold comenzará a transformarse usando la autoridad que le proporciona su nueva identidad, revelando la monstruosa esencia de aquellos de los que trata de escapar.
El marco invisible (The invisible frame)
Cynthia Beatt, color, 59 min, 2009.
En 1988 la directora británica Cynthia Beatt, que vive en Berlín, se embarcó en un viaje a un territorio poco conocido. Filmó a Tilda Swinton mientras ambas recorrían el Muro, capturando el Berlín occidental que miraba hacia adentro y las vistas de Berlín oriental sobre el Muro. En junio de 2009, Cynthia Beatt y Tilda Swinton volvieron a recorrer la línea del Muro que una vez aisló a Berlín y dividió Alemania. El marco invisible describe este viaje y sigue las huellas del Muro 21 años después a través de paisajes variados, esta vez a ambos lados del antiguo Muro.
El largo verano de la teoría (Der lange sommer der theorie)
Irene von Alberti, color, 82 min, 2017
Berlín, verano del 2016. En la última casa perdida en tierra de nadie, detrás de la nueva estación ferroviaria Nola, Katja y Martina comparten su vivienda y conforman una pequeña comuna de artistas. Pero se les acaba el tiempo, ya que pronto se edificará en este lugar el emprendimiento de desarrollo urbano Europacity. Las jóvenes mujeres pasan los últimos días en su departamento siguiendo su modesto estilo de vida, hasta que Nola decide hacer una película para indagar sobre este cambio de era.
Puesta en escena como ensayo teatral discursivo, El largo verano de la teoría aborda un gran número de cuestiones en torno al feminismo, al espacio público, a la gentrificación, a la teoría y la práctica.
Porque soy más bella (Weil ich schöner bin)
Frieder Schlaich, color, 82 min, 2012.
Charo, de 13 años y de origen colombiana, parece la típica adolescente berlinesa. Es una estudiante rodeada de buenos amigos y tiene el ojo puesto en el chico más genial de la escuela. Pero nadie sabe que Charo ha estado viviendo en Alemania ilegalmente durante años, ni siquiera su mejor amiga Laura. Los problemas empiezan a surgir cuando la madre de Charo es atrapada por la policía y quieren deportarla a Colombia. Charo se ve obligada a compartir su secreto con Laura, porque es la única manera de que pueda luchar por su futuro en Alemania.
El viaje de Naomi (Naomis Reise)
Frieder Schlaich, color, 92 min, 2018.
Elena trabaja duro en un distrito rico de Perú, ocupándose de una casa y del cuidado de los niños. Aun así, no se le concede la licencia no remunerada que pidió. Viaja igual a Berlín junto con su hija Naomi, de 20 años, ya que en Berlín quiere y tiene que presentarse ante el tribunal como demandante en un juicio por asesinato de Mariella, su hija mayor. En El viaje de Naomi, Frieder Schlaich escenifica este juicio y lo contrasta con las emociones agitadas de los familiares involucrados: No como un melodrama, sino como un thriller de otro tipo de justicia, que crea un universo entero a partir de interrogatorios y súplicas.
Parabeton- Pier Luigi Nervi and Roman Concrete (Parabeton– Pier Luigi Nervi Und Römischer Beton)
Heinz Emigholz, color, 100 min, 2012.
Parte del proyecto Retirada del modernismo, que clausura la serie Arquitectura como autobiografía, Parabeton comienza con imágenes de la primera cúpula de concreto, todavía en pie, construida por los romanos en el siglo I a.C. en Baiae, cerca de Nápoles, y continúa su recorrido cronológicamente por veinte construcciones del ingeniero civil italiano Pier Luigi Nervi (1891-1979), inventor, maestro de las estructuras de concreto y el arquitecto de arquitectos del siglo XX.
El montaje de estos trabajos, interrumpido de tanto en tanto por imágenes de otras grandes estructuras romanas antiguas, le sirve a Emigholz no sólo para trazar un vínculo entre las construcciones revolucionarias de Nervi y las invenciones pioneras romanas, sino también para llevar su monumental repaso del ascenso y caída de la arquitectura moderna hasta los orígenes mismos de la Modernidad. (Catálogo BAFICI 2012)