El juez federal Claudio Bonadio salió sorteado para investigar a su colega Luis Rodríguez, luego de que Carolina Pochetti, una de las imputadas colaboradoras en la denominada “causa de los cuadernos”, declarara que le pagó coimas al magistrado para que no avanzara en una causa por lavado de dinero contra su marido, el ex secretario presidencial Daniel Muñoz.
Tras recibir la declaración de Pochetti y de otros imputados que sostuvieron la misma denuncia, Bonadio extrajo testimonios de la versión del supuesto ilícito y lo envió a sorteo de la Cámara Federal para que sea investigado en otra causa.
Por sorteo, el caso recayó en el magistrado a cargo de la “causa de los cuadernos”, que está de turno, junto al fiscal Gerardo Pollicita.
Rodríguez negó “categóricamente” haber pedido o cobrado una coima para trabar la investigación contra Muñoz.
Bonadio procesó a Pochetti
En el marco de la “causa de los cuadernos”, Claudio Bonadio dispuso el procesamiento con prisión preventiva de Carolina Pochetti, viuda del ex secretario presidencial Daniel Muñoz, como “partícipe necesaria de supuestas maniobras de lavado de dinero”.
También procesó al ex funcionario kirchnerista Juan Manuel Campillo y al detenido ex contador de la familia Kirchner, Víctor Manzanares.
El magistrado dispuso, además, embargos que van desde los 1.000 a los 3.000 millones de pesos.
Entre los procesados por estos delitos están los empresarios inmobiliarios Sergio Todisco y Elizabth Municoy, el intermediario Carlos Cortez y al primo de Pochetti, Carlos Gellert.
Manzanares hizo un acuerdo como imputado colaborador con el fiscal del caso, Carlos Stornelli, que indicó que el contador aportó información “de las más importantes” en su declaración. Sin embargo, el acuerdo no fue homologado por el juez.
