El mundo árabe, musulmán y los aliados europeos de Estados Unidos condenaron hoy la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer a Jerusalén como capital de Israel y advirtieron sobre las tensiones que pueda acarrear en Medio Oriente.
En la región, apenas conocida la decisión del mandatario estadounidense, se registraron las primeras protestas contra el anuncio, por el que el Consejo de Seguridad de la ONU pidió una reunión de urgencia que se realizará este viernes, según confirmó la delegación japonesa, a cargo de la presidencia del organismo.
El anuncio de Trump, recibido con profundo agradecimiento en Israel y gran irritación en Palestina, también fue criticado por el papa Francisco, quien expresó “profunda preocupación” por el futuro estatus de los lugares sagrados cristianos, musulmanes y judíos que alberga Jerusalén.
Es más, varios países que integran el Consejo de Seguridad de la ONU pidieron hoy una reunión urgente de ese órgano con el fin de analizar una respuesta ante el anuncio de Estados Unidos.
La misión boliviana ante la ONU informó que la reunión fue solicitada por ocho de los quince integrantes del consejo: Bolivia, Egipto, Francia, Italia, el Reino Unido, Senegal, Suecia y Uruguay, informó la agencia de noticias EFE.
Egipto, uno de los principales socios de Washington en la región y el único país árabe que, junto con Jordania, tiene un tratado de paz con Israel, dijo que “este tipo de decisiones unilaterales supone una transgresión de las resoluciones internacionales legítimas” y manifestó “gran preocupación por las posibles consecuencias” para la estabilidad de Medio Oriente.La iniciativa de Trump, anunciada cuando ya anochecía en Medio Oriente, desató ya protestas que se teme escalen en los próximos días.
En el Líbano, cientos de refugiados palestinos se manfiestaron contra la decisión en campamentos de Beirut, la capital, y del norte del país, mientras que unos 2.000 estudiantes hicieron lo propio en la sureña ciudad de Tiro, informó la agencia de noticias estatal ANN.
En Turquía, cientos de personas salieron a las calles para protestar cerca de misiones diplomáticas estadounidenses en Ankara y Estambul.En tanto, en Jordania, también hubo protestas en Aman y otras ciudades del país, y la embajada estadounidense en la capital suspendió temporalmente sus servicios públicos rutinarios por temor a posibles incidentes durante las manifestaciones.
Arabia Saudíta, una potencia sunnita regional y un aliado que Estados Unidos necesita para sacar cualquier acuerdo de paz en Medio Oriente, se opuso a la decisión de Trump y dijo que podría “provocar los sentimientos de los musulmanes en todo el mundo”.
(Con información de Telam)