El Día Internacional del Libro fue la fecha elegida para que la poeta, traductora y ensayista uruguaya Ida Vitale reciba el Premio Cervantes. El 23 de abril próximo, en una ceremonia en la ciudad de Madrid, Vitale recibirá el galardón. El acto, que tendrá lugar en la Universidad de Alcalá de Henares, será presidido por los Reyes de España, Felipe VI y Letizia.
El galardón es el más importante que pueden recibir los escritores hispanos. Tal es así que se lo considera como el Nobel de literatura en español. Vitale recibirá un premio de 125.000 euros en reconocimiento a su trayectoria y sus importantes aportes al acervo cultural de las letras hispánicas.
El Premio Cervantes fue otorgado a Vitale por “su lenguaje, uno de los más destacados y reconocidos de la poesía moderna en español“, y por su trayectoria “de primer orden“, según destacó el jurado.
El galardón, que la autora obtuvo en noviembre pasado, rompió con una tradición de alterar ganadores latinoamericanos con españoles. Ya que en el año 2017 el Cervantes recayó en el nicaragüense Sergio Ramírez, los expertos especulaban con la posibilidad de que lo obtuviera un europeo.
Sin embargo, fue la poeta uruguaya nacida en Montevideo en noviembre de 1923, quien se quedó con el prestigioso premio.
Ida Vitale, con 95 años, se alza como la quinta mujer de la historia en ganar el prestigioso galardón. Poeta, traductora, ensayista y crítica literaria Vitale formó parte de la llamada “Generación del 45”. Estudió humanidades y fue profesora hasta 1974, cuando debió exiliarse en México, debido a la dictadura militar.
Durante su estadía en México conoció a Octavio Paz. El reconocido escritor la integró en el comité asesor de la revista “Vuelta”. Además, participó en la fundación del semanario «Uno más Uno». Paralelamente, continuó dedicada a la enseñanza, impartiendo un seminario en el Colegio de México.
La obra de Vitale se destaca por su rigor formal, una límpida dicción y un refinado sentido del idioma. Su primer libro se publicó en 1949 con el título de “La luz de esta memoria”
A lo largo de su trayectoria cultivó el ensayo y la crítica literaria. Además se desempeñó como traductora. Tradujo a grandes autores franceses e italianos como Simone de Beauvoir, Benjamin Péret y Gaston Bachelard. Pero también a Jacques Lafaye, Jean Lacouture y Luigi Pirandello.
Su poesía indaga en la alquimia del lenguaje. Establece un encuentro entre una exacerbada percepción sensorial de raíz simbolista y la cristalización conceptual en su perfil más preciso.
Su itinerario como escritora le permitió cosechar prestigiosos galardones. Además del recientemente obtenido Premio Cervantes, recibió otros galardones importantes. Entre ellos se destacan el premio Octavio Paz, el Alfonso Reyes y el Max Jacob.
Entre sus poemarios se destacan “Un invierno equivocado”, “Procura de lo imposible” y “Jardín de sílice”. Mientras que sus obras ensayísticas más importantes son “Cervantes en nuestro tiempo” y “De plantas y animales: acercamientos literarios”, entre muchos otros.