La artista argentina Liliana Porter presentará una exposición a gran escala titulada “El hombre con el hacha y otras historias” desde el 5 de febrero en el Frist Art Museum, ubicado en Nashville, capital de Tennessee, Estados Unidos.
Se trata de una instalación a gran escala de la artista argentina “famosa por ordenar los objetos cotidianos desechados para crear viñetas teatrales que son filosóficamente provocativas y astutamente humorísticas”, señalan desde el museo a través de un comunicado.
La exposición, que estará abiera hasta el 2 de mayo de 2021, tendrá como pieza central a “El hombre con el hacha y otras historias” (2017), cedida por el Pérez Art Museum de Miami, pieza que ofrece una vista panorámica de una civilización reducida a escombros.
El extenso trabajo presenta una pequeña figura de plástico de un hombre con un hacha que parece haber demolido una variedad de elementos, desde muebles de casa de muñecas hasta jarrones, relojes y un piano de tamaño real. “Como el tiempo mismo, una cosa diminuta, un virus, una ideología peligrosa o una persona solitaria, puede derribar un reino o un mundo”, escribe Mark Scala, curador en jefe del Frist Art Museum.
“Rica en melancolía, humor, desesperación y esperanza, la instalación muestra al hombre del hacha como una encarnación sociópata del tiempo mismo, congelado para siempre en un solo momento, desplegándose para siempre en un patrón de violencia y renovación”, agrega Scala.
Esta perspectiva enigmática continúa a lo largo de la exposición, por ejemplo en “To Do It: Red Sand III”, una figura femenina que parece barrer incansablemente una enorme cantidad de arena roja dispuesta en un espiral laberíntico.
“En la obra de Porter, la historia está en perpetuo movimiento y en un estado de ruina, el trabajo es esencial pero siempre se deshace, y las asociaciones entre objetos y lenguaje son infinita y alegremente elásticas”, concluye el curador en jefe del museo tennesiano.
Porter (1941) es una artista versátil que reside en Estados Unidos desde hace más de 50 años. Nació en un hogar de artistas, ya que su padre, Julio Porter, era escritor y director de cine y su madre, Margarita Galetar, poeta y grabadora.