Enemigo declarado del Brexit, el maestro de las novelas de espionaje John Le Carré decidió nacionalizarse irlandés poco antes de su muerte en diciembre, según contó un amigo íntimo.
“John Le Carré, cronista de los ingleses, murió siendo irlandés”, escribió su amigo, el escritor Philippe Sands, en un artículo publicado por el diario The Times.
Según explica Sands, fue uno de los hijos del novelista, Nick, quien le contó esta información mientras preparaba un programa de radio sobre la figura de John Le Carré.
Días antes de morir y consciente de que tenía orígenes irlandeses, el escritor -cuyo nombre verdadero era David Cornwell- viajó al sur de Irlanda para iniciar el trámite.
Sands reconstruyó el momento en el que Le Carré concretó su deseo: “En Cork, de donde era su abuela, lo recibió la archivera de la ciudad en un lugar muy pequeño y le dijo ´bienvenido a su hogar'”.
Según contó el hijo del escritor, una de las últimas fotos que guarda de su padre lo muestra como un auténtico ciudadano irlandés: “Sentado, envuelto en una bandera irlandesa, sonriendo”.
Le Carré era eurófilo y no ocultaba su desacuerdo con el Brexit. En “Un hombre decente”, su última novela, calificó al primer ministro británico Boris Johnson como un “cerdo ignorante” y consideraba a la salida del Reino Unido de la Unión Europea como una “locura”.
En una entrevista publicada por el diario El País en octubre de 2019 explicó´ los motivos de su posicionamiento: “Es sin duda alguna la mayor idiotez y la mayor catástrofe que ha perpetrado el Reino Unido desde la invasión de Suez . Es un desastre autoinfligido, del que no podemos echar la culpa a nadie, ni a los irlandeses, ni a los europeos… Somos una nación que siempre ha estado integrada en el corazón de Europa”.
John Le Carré, quien murió en diciembre a los 89 años, escribió 25 novelas y también un libro de memorias, “El túnel de las palomas” (2016). Se calcula que vendió más de 70 millones de libros en todo el mundo.
Su obra está está en gran parte inspirada en su carrera previa como agente secreto, arruinada cuando una agente doble británica reveló al KGB soviético su identidad y la de otros de sus compatriotas.