Una langosta de un color inusual fue encontrada en la bahía de Nueva Inglaterra (EE.UU.). El capitán de un buque pesquero halló el crustáceo, que tiene la mitad de su cuerpo de color naranja brillante y la otra de color negro, y lo entregó al Centro de Pesca Costera de Maine.
El aniamal se unió a otros especímenes que ya se exhiben en un tanque de agua salada de dicho centro, entre ellos un ejemplar de color azul y un par de raras langostas calicó (que tienen una coloración moteada, de tonos naranja y negro). La especie pasará una corta temporada en el lugar, para que los visitantes puedan observarla y educarse sobre estos curiosos animales, y luego será devuelta a las aguas marinas de donde fue extraída.
Según los especialistas, la singular pigmentación de esta langosta se debe a una mutación genética y la posibilidad de encontrar un ejemplar con esas características es de una en 50 millones.