El Centro Cultural Recoleta (CCR) y la Bienal de Arte Joven de Buenos Aires organizan un encuentro con directores, dramaturgos, artistas y gestores culturales, de diferentes partes del país, que participan de una residencia de intercambio en el marco del Festival Internacional.
En esta oportunidad el Grupo Cabotaje, que nació en el primer Foro de Artistas Jóvenes, estrenará durante el 12°FIBA “La parte que perdí” una obra que surge a partir de un año de investigación escénica. El dramaturgo, director y coordinador del Foro, Ariel Gurevich, reflexiona sobre los espacios de formación y la producción artística contemporánea.
Diario Vivo: ¿Cómo definirías la experiencia del Foro Joven?
Ariel Gurevich: “El espacio va a ser lo que hagamos de él”, les digo el primer día a los integrantes del Foro que van a compartir una experiencia de convivencia y residencia en el CCR. Son 10 días en los que distintos creadores de las artes escénicas de todo el país ven obras, participan de talleres y encuentros de reflexión con un ritmo muy intenso. Es un formato que implica suspender la propia práctica por unos días para pensar el festival, las obras, y el hacer propio, por eso es muy importante la convivencia.
Diario Vivo: En esta edición estren “La parte que perdí” una obra que surge con algunos integrantes del primer Foro ¿Era una resolución pensada de manera previa o surgió de la propia espontaneidad del trabajo y la experimentación colectiva?
Ariel Gurevich: El foro, al enfocarse desde la reflexión, no tiene espacios para desarrollar una creación grupal y, en el cierre del último día, surgió la idea de armar un proyecto colectivo. En ese momento era un delirio porque muchos viven en otras provincias y realmente es muy difícil sostener eso durante un año, pero la experiencia del primer foro fue muy linda y la idea de crear algo en conjunto estaba sostenida por las ganas. Me propusieron sumarme y dije que lo haría como par y no como coordinador, en esa nueva instancia, lo que hicimos fue realizar residencias autogestionadas, la primera fue en Tigre, después la Plata, Córdoba y Capital.
Diario Vivo: ¿Cuáles fueron los aspectos centrales a trabajar durante esas residencias?
Ariel Gurevich: Fue todo un aprendizaje encontrar dinámicas de trabajo. El tema era producir en relación a una hipótesis que al principio no estaba tan clara, por eso empezamos a probar materiales, armar una agenda de trabajo, discutir a partir de lo que el grupo producía y, para optimizar el tiempo, nos dividimos en comisiones. Por ejemplo, en Tigre surgió como dinámica que algunos dieran consignas por día y el grupo creaba a partir de eso. Así comenzamos a producir lo que después decantó en una obra que tiene que ver con el afecto, el encuentro con el otro y preguntas en torno a lo natural y su relación con lo virtual o lo artificial. Tomamos al zoológico de la Ciudad de Buenos Aires y el proyecto del ecoparque como hipótesis poética para indagar, a partir de trabajar sobre lugares/conflictos anclados en ciertos territorios.
Diario Vivo: Por tu experiencia como dramaturgo ocupaste, en esta oportunidad, el rol de autor
Ariel Gurevich: Cada uno trató de colaborar desde donde podía aportar al grupo de manera más rica. No es la obra de un autor que se dirige y la interpretan los actores, es una creación grupal. Si bien hay áreas, porque algunos se encargan más en la producción, dramaturgia o dirección, surge a partir de generar una experiencia en común. Al crear un proyecto en conjunto, era importante que lo que hagamos contenga esa experiencia de nosotros como grupo, como espacio de creación. En la obra eso está presente desde la pregunta “¿Cómo estar juntos?”. .
Diario Vivo: ¿El proyecto exhibe un resultado del enriquecimiento artístico que se adquirió durante el primer Foro de Artistas Jóvenes?
Ariel Gurevich: En el foro nos empezamos a constituir como grupo y por las características del FIBA pasado había ciertos significantes presentes como el diálogo, el otro, la fiesta, lo transterritorial, las obras en las que el actor estaba sustraído o en espacios no convencionales. Eran elementos recurrentes durante el festival que quedaban flotando. Incluso, al principio surgió como organizador crear una obra en un espacio natural, sobre esa hipótesis se disparó como escenario la reserva ecológica. Finalmente decidimos que no, pero algo de esas pruebas quedaron remanentes.
Diario Vivo: “La parte que perdí” es una coproducción con el FIBA y el CCR
Ariel Gurevich: Cuando empezamos las residencias autogestionadas le comentamos a integrantes del CCR y a Federico Irazábal, director artístico del FIBA, y estaban muy contentos de que el foro haya tenido ese impulso. Era algo muy esperado por ellos, parte de los objetivos es generar un espacio de reunión, tender redes a largo plazo y vincular a los creadores de las artes escénicas. Que no sean esos 10 días y nada más. Una buena forma de incentivar el proyecto es la coproducción. Si bien no está en los objetivos del foro la premisa de que el grupo deba crear al año siguiente una obra de teatro, de alguna manera esto sienta un precedente. El nuevo foro de este año va a venir a ver el estreno de “La parte que perdí”, vamos a charlar con ellos y de alguna manera se continúan y extienden los espacios de creación, reflexión y encuentro.
Ficha técnica
Compañía: Grupo Cabotaje / Comisión dramatúrgica: Ariel Gurevich, Gonzalo Facundo López / Comisión de dirección: Victoria Hernández, María Palacios / Comisión de producción: Adrián Grimozzi, Gonzalo Facundo López, Cecilia Zoppi / Coordinación técnica y diseño de iluminación: Adrián Grimozzi / Intérpretes: Tamara Alfaro, Nidia Casís, Gonzalo Facundo López, Carla Pessolano, Micaela Piccarelli, Cecilia Zoppi / Coproducción: 12 FIBA, Centro Cultural Recoleta / Funciones Martes 29 de enero a las 20hs / Miércoles 30 de enero a las 20:30h en El Cultural San Martín.