Llega febrero, época de festivales. A casi un mes de su apertura, el espacio de Boedo arranca con una programación presencial y con la cita ineludible del verano, el festival Temporada Alta. La novena edición comienza el próximo jueves 11 de febrero con propuestas internacionales de Cataluña, México, Chile, Francia y Argentina con el objetivo “fijado en mantener el compromiso con la cultura, la creación y el público”, la sala de Boedo presenta una grilla mixta en formatos y formas de expectación.
“La programación se convirtió en una oferta muy diversa en cuanto a formatos, pero sigue manteniendo el espíritu de un teatro independiente que busca adaptarse, seguir reflexionando en cuanto a los lenguajes sobre lo que está pasando en el escenario mundial”, afirma Mónica Acevedo, productora y coordinadora artística de Temporada Alta Buenos Aires.
“A nivel creativo, hubo un gran desafío de seguir trayendo material que tenga un sentido y un valor en estas circunstancias. Todos los proyectos abordan esa imposibilidad de seguir trabajando como veníamos acostumbrados y, sin embargo, tener que seguir pensando y adaptándose a estos escenarios. Todos incorporaron un proceso de reflexión y de desplazamiento, entonces tocan temáticas que tienen la intención de dialogar con el hoy y de seguir ofreciendo oportunidades de contacto con los espectadores”, agrega Mónica Acevedo.
La grilla de este año comienza con una variedad de propuestas de Cataluña. Se encuentra Audioguía para supermercado en tiempos de pandemia del dúo de artistas sonoros CaboSanRoque, una experiencia sonora para descargar y escuchar a través de un celular y/o tablet. Simula la situación de pasear por un supermercado a través de sonidos cotidianos.
Se respira en el jardín como en un bosque es otra de las propuestas desde Cataluña. “Es una instalación teatral que se está realizando a distancia y genera una reflexión en torno a la expectación y a su ausencia. Un espectador entra a la sala, observa una situación. Mientras dura esa experiencia, él pasa a ser el intérprete. Así se va generando un círculo que va renovándose cada cierto período de tiempo. Habilita una experiencia muy particular para quienes participan de la obra”, señala Mónica Acevedo sobre esta propuesta de la compañía catalana El Conde de Torrefiel.
La nueva edición de Temporada Alta también ofrece la posibilidad de generar y reforzar lazos entre los creadores y los artistas. Por primera vez, se presentarán dos obras en simultáneo con las ediciones de Perú y Uruguay. “Este festival ha hecho generar y estrechar mucho los lazos entre creadores. Eso me parece muy estimulante. Gracias a la virtualidad, hemos podido generar más cosas en conjunto. Habrá dos obras en sintonía con las otras ediciones del festival; Psicosis 4.48 de Sarah Kane e Informe para una academia, basado en un cuento de Kafka. Son dos unipersonales que marcaron dos puntos muy altos en el festival del 2018”, afirma Mónica Acevedo.
Una de las presencias habituales de las últimas ediciones del festival es la Compañía Vaca 35 que estará presentando dos trabajos en coproducción con TIMBRe 4; Proyecto Mujeres y Cuando todos pensaban que habíamos desaparecido, ambos se fundan en una investigación profunda de cada intérprete en proceso de montaje.
“Con la compañía Vaca 35 hay un vínculo bastante cercano de amistad y de intercambio porque es bastante familiar a nuestra búsqueda. A mitad del año pasado, se generaron dos equipos de trabajo a distancia con la intención de juntarnos y hacer una puesta en escena. Proyecto Mujeres reflexiona sobre la idea de mujer que está siendo repensada y resignificada en los escenarios y Cuando todos pensaban que habíamos desaparecido reflexiona en torno al ritual de la comida como un espacio de memoria, tiene que ver con un ejercicio en conjunto de memoria y de vínculo entre México y Argentina”, señala.
Chile también presenta obras en formato audiovisual. En el campo cinematográfico, se presentará Mirando fijo algo que explota de Tomás Espinosa, un mediometraje centrado en el estallido social ocurrido en octubre de 2019 y en las víctimas del trauma ocular, que le ocurrió a más de cuatrocientos chilenos y chilenas que aún exigen justicia. También se presentará Contagio creativo, un trabajo colectivo de video-danza realizado por la primera residencia inclusiva en danza del centro cultural Gabriela Mistral. “Es una residencia creativa realizada por un director de teatro, una cineasta y cuatro intérpretes con discapacidad. Han investigado tres ámbitos; la fuerza, el tiempo y la energía. Es una película de altísima poesía visual”, cuenta Mónica Acevedo sobre este proyecto y adelanta que habrá charlas virtuales con los directores de ambos proyectos.
Desde Francia, se presenta Lettres du continent de Virginie Dupray, una pieza audiovisual con diversos autorretratos de bailarines, coreógrafos, intérpretes y directores que abrirá el festival. La grilla sigue con Les impassé.e.s., un dispositivo coreográfico creado por Julie Nioche dirigido a distancia con bailarines locales en Buenos Aires y Lima. “Este proyecto nació de la motivación de la coreógrafa de compartir su danza con sus vecinos. Se estará presentando en Perú y en Ecuador en simultáneo con bailarines locales”, afirma la coordinadora artística de Temporada Alta Buenos Aires.
La propuesta de Argentina será Imprenteros protagonizada por Lorena Vega, hermanos, actores y actrices invitados. Realizará dos funciones presenciales.
A la programación nacional e internacional, se suma otro de los eventos clásicos de Temporada Alta; el torneo de dramaturgia trasatlántico que se desarrollará el 19, 20 y 21 de febrero. Este año, tendrá una modalidad presencial con aforo reducido y también se transmitirá por Facebook Live. Según afirman desde la organización del festival, así culminarán días “de estímulo y acompañamiento con obras de distintas latitudes, pero que cruzan deseos, motivaciones y búsquedas artísticas”,
Festival internacional Temporada Alta en Buenos Aires
Del 11 al 21 de febrero.
Más información en: https://www.temporadaaltaenbuenosaires.com/