El alcalde de extrema derecha de Perpiñán ordenó hoy abrir cuatro museos de esa ciudad del sureste de Francia, desafiando las restricciones del Gobierno central que mantiene cerrados todos los museos del país debido a la pandemia de coronavirus.
“Hay un virus, lo tenemos desde hace mucho tiempo, tenemos que vivir con él. Habrá variantes, habrá virus, hay tratamientos, hay vacunación, hay todas las precauciones que tomamos, acostumbrémonos”, dijo Louis Aliot, del partido ultraderechista Agrupación Nacional, ante la prensa. Los museos de todo el país, así como los restaurantes, bares, cines y gimnasios están cerrados desde hace meses y reclaman por su reapertura.
“Creo que el museo es un lugar muy agradable para hacerlo porque es un lugar donde se pueden controlar las cosas lo mejor posible. Estamos de vacaciones. Hay jóvenes a los que hoy se les impide hacer deporte, ir a las estaciones de esquí. Abramos un poco los museos y los lugares de cultura para ellos”, agregó.
El museo de arte Hyacinthe-Rigaud de Perpiñán dijo que unos 50 visitantes habían llegado hoy por la mañana a los 15 minutos de su reapertura. “Hay mucha gente”, dijo una recepcionista en declaraciones a la agencia de noticias AFP. El museo de arte catalán Casa Pairal y el Museo de Historia Natural también confirmaron su reapertura. El cuarto, el museo de la moneda Joseph Puig, reabriría mañana.
Anoche, el representante regional del Estado había acudido a los tribunales para intentar suspender la reapertura. La ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, prometió ayer que los museos y monumentos nacionales serían los primeros lugares en reabrir, pero sólo cuando los índices de infección disminuyan.
Después de hablar con 30 directores de museos, Bachelot dijo que se habían mostrado “muy abiertos” a aplicar un límite de un visitante cada 10 metros cuadrados, frente a uno por cada 4 metros cuadrados antes del cierre.
La semana pasada, cientos de personas de la comunidad artística firmaron dos peticiones al gobierno para que permitiera la apertura de los museos. “Durante una hora, un día, una semana o un mes, déjennos reabrir nuestras puertas, aunque tengamos que volver a cerrarlas en caso de que se produzca otro cierre”, pedían.
(Télam)