La empresa china Huawei acusó hoy a Estados Unidos de lanzar una serie de ciberataques para infiltrarse en sus redes internas y de organizar una campaña para intimidar e incluso “arrestar ilegalmente” a sus empleados.
La declaración se produce en paralelo al inicio de una investigación del Departamento de Justicia estadounidense por el presunto robo de patentes de cámaras de teléfonos inteligentes, una acusación que la compañía asiática rechazó de forma rotunda.
El gobierno estadounidense “ha estado utilizando todas las herramientas a su disposición, incluidos los poderes judiciales y administrativos, así como una serie de otros medios sin escrúpulos, para interrumpir las operaciones comerciales normales de Huawei y sus socios”, denunció la empresa en un comunicado.
Entre otros puntos, la firma china acusó a la Casa Blanca de “instruir a las fuerzas del orden público para que amenacen, coaccionen e inciten a empleados y ex empleados de Huawei a volverse contra la empresa y trabajar para ellos”, así como a “buscar, detener e incluso arrestar ilegalmente a empleados y socios de Huawei”.
“Condenamos enérgicamente el esfuerzo maligno que está haciendo el Gobierno de Estados Unidos para desacreditar a Huawei y acabar con su posición de liderazgo en la industria”, añadió la firma, que también sostuvo que “ninguna empresa se convierte en líder mundial de su sector a través del robo”.