Gustavo Fernández quedó a un paso de coronar el Grand Slam en tenis adaptado luego de ganar hoy por primera vez el torneo de Wimbledon en Londres con una victoria sobre el número uno del mundo, el japonés Shingo Kunieda, por 4-6, 6-3 y 6-2 en la final.
El cordobés, nacido en Río Tercero hace 25 años, pudo tomarse revancha por las dos definiciones perdidas en el All England Club en 2017 y 2018, con lo que se transformó en el primer argentino en consagrarse como singlista campeón en la Catedral del tenis.
El “Lobito” Fernández tendrá como próximo desafío la conquista del Abierto de Estados Unidos en septiembre para ingresar en la historia como ganador del Grand Slam, que consiste en coronar en una misma temporada los cuatro torneos más importantes del circuito profesional.
El argentino fue campeón este año del Abierto de Australia y luego de Roland Garros y sumó el quinto título “major” en su carrera, ya que había sido campeón en París en 2016 y un año más tarde por primera vez en Melbourne.
Tras el error no forzado del japonés que definió la final, Fernández lanzó un grito de desahogo para dar paso a un emocionado festejo junto al grupo de trabajo que lo acompañó en el complejo tenístico londinense.
El entrenador Fernando San Martín, el kinesiólogo Juan Carlos Varela, el sparring Juan Ignacio Crespo, Santiago Sánchez, un catedrático argentino que es director de una maestría en la Universidad de Bath y trabaja la concentración del tenista, más algunos familiares compartieron el histórico momento con el cordobés.
El tenista de Río Tercero es hijo de Gustavo Ismael Fernández, ex basquetbolista con destacada trayectoria en la Liga Nacional de Básquetbol (LNB) y actual entrenador de Estudiantes de Olavarría, y hermano de Juan Manuel, que se desempeña como base en la segunda división de Italia.
Para instalarse por tercera vez en la final de Wimbledon había vencido en cuartos de final al británico Alfie Hewett por 6-1 y 6-3, y en semifinales al francés Stephane Houdet por 6-0 y 6-4.
Al partido decisivo de hoy, jugado sobre la cancha número tres del All England, Fernández llegaba con un historial desfavorable de siete victorias y 22 derrotas frente a Kunieda, al que sin embargo le había ganado este año por 6-3 y 6-2 en la final del Masters 1000 de París, sobre superficie dura.
El japonés, que fue su verdugo en tres finales de Grand Slam (2014 en Australia y Estados Unidos; 2018 en Roland Garros), parecía encaminarse a una nueva victoria cuando se llevó el primer set por 6-4.
Pero Fernández se hizo fuerte sobre el césped de Wimbledon, exhibió un juego sólido en las últimas dos mangas de la final y se adueñó del título después de dos horas y dos minutos de juego.
Impresionante Gustavo Fernández, campeón en Wimbledon y número 1 en el mundo!!! 🏆 un orgullo para todos los argentinos 👏🏻👏🏻👏🏻 pic.twitter.com/ebdBw2usDp
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) July 14, 2019
(Fuente Telam)