Huawei presentó este jueves en Berlín su nueva gama de teléfonos insinga, los Mate 30, la primera que llega luego de la prohibición comercial estadounidense y que por lo tanto funcionará con una versión de código abierto de Android pero sin acceso a aplicaciones de Google, como Gmail, Maps o Youtube.
Se trata del primer gran lanzamiento de la empresa china luego de que en mayo el gobierno de Estados Unidos la colocara en la lista negra (la “Lista de Entidades”) del Departamento de Comercio, lo que en los hechos le prohíbe comprar suministros de empresas estadounidenses.
Esa restricción comercial, que abarca tanto a piezas de hardware -como procesadores o micrófonos- como de software -aplicaciones-, apuntó a romper la cadena de suministros de Huawei, segundo fabricante mundial de teléfonos, y generó expectativas sobre cómo el fabricante asiático se las arreglaría para seguir vendiendo sus smartphones.
Los Mate 30 vienen con una versión de código abierto de Android, llegan sin licencia de Google y por lo tanto los propietarios de estos equipos no podrán acceder a los servicios ni a las apps del gigante de Internet, ni siquiera a la tienda Play Store para descargar aplicaciones.
Huawei ofrecerá en cambio una interfaz propia, con aplicaciones alternativas, como lo viene haciendo desde hace años en China, donde la gran mayoría de las apps de Google no están disponibles desde que en 2010 la empresa norteamericana abandonó el país por desacuerdos con Beijing sobre el respeto por los derechos humanos.
(Télam)