El director ejecutivo de la ANSES, Emilio Basavilbaso, dio hoy el visto bueno a la posibilidad de extender de manera optativa la edad jubilatoria, al señalar que “sería ideal que sea voluntaria”.
El funcionario aclaró que “no” hay actualmente en el Ejecutivo o en el Legislativo” un proyecto sobre ese aspecto en particular, aunque recordó que “el Gobierno presentó el año pasado en el Congreso una propuesta para que dentro de los próximos tres años se debata el régimen previsional argentino”. Ese proyecto, dijo, “sí estableció que el sistema tiene que ser público”, cerrando la puerta a un eventual regreso de las AFJP.
Basavilbaso fue consultado desde Radio La Red sobre una posible reforma previsional según la cual habría una extensión optativa de la edad jubilatoria.
“Mi opinión es que lo ideal sería tener un sistema, como he leído que tienen otros países, donde la edad es voluntaria, es decir, el trabajador tiene la opción, después de los 65 en el caso del hombre, o después de los 60 en el caso de la mujer, de seguir trabajando”, contestó.
El Gobierno dejó trascender en las últimas horas que para la reforma previsional busca extender la edad jubilatoria, a partir de informes según los cuales cada año unas 50 mil personas siguen trabajando y no se jubilan cuando cumplen la edad legal para retirarse.
Según Basavilbaso, “lo que dice la ley que fue votada por el 82% del Congreso es que tiene que formarse una comisión especial dentro del Congreso para estudiar todos los temas previsionales. Esa Comisión aún no se conformó, así que todavía no hay ningún proyecto concreto, pero sí está la intención, durante los próximos tres años, analizar si hay que hacerle modificaciones al sistema”.
Sobre la extensión optativa de la edad jubilatoria, el funcionario enfatizó que ello significaría que “en el futuro” el haber de quien extienda su vida laboral “va a ser mayor. El Gobierno pone incentivos para que si la persona está bien físicamente y quiere seguir trabajando, pueda seguir, y eso le signifique una mejor jubilación en el futuro”.
“Para mí (la edad) no es inamovible, de hecho en muchos países la están cambiando”, consideró. En igual línea, remarcó que “lo ideal sería no imponer una edad, sino que el Estado ponga incentivos tal que, aquella persona que quiera seguir trabajando, pueda seguir haciéndolo, y esos aportes que sigue realizando multipliquen, tal vez, con un coeficiente mayor y hagan que su jubilación sea mayor en el futuro”.
“Mi opinión es que la persona que quiera seguir jubilándose a los 60 o 65 pueda seguir haciéndolo, como hasta ahora. No hay ningún proyecto tratándose en el Ejecutivo. Tendrá que decidir el Congreso cambios en el sistema previsional. La única definición es que el sistema tiene que ser público, es lo único que hemos puesto en la ley (enviada el año pasado al Congreso)”, añadió.
“En la Argentina cada año la expectativa de vida se alarga en dos meses. Los argentinos tenemos cada vez menos hijos, lo que hace que haya cada vez menos aportantes. Casi todos los países de la región están analizando cambios en el sistema en función de que cada día hay mayor expectativa de vida”, justificó. El director de la ANSES aclaró que “todavía no se discutió ni se presentó nada, ni hay un proyecto realizándose en el Ejecutivo ni creo en el Legislativo hablando de cambio de edad, pero sí se estableció que el sistema tiene que ser público”.