En un reciente ensayo publicado en España, la periodista y escritora argentina Lucía Lijtmaer aborda la criminalización de la protesta y la respuesta neoconservadora ante un movimiento feminista cada vez más pujante y combativo. En “Ofendiditos. Sobre la criminalización de la protesta”, la autora nacida en Buenos Aires pero que vivió durante casi toda su vida en Barcelona aborda alguno de los tópicos más relevantes de la actualidad del panorama mundial.
“Los ofendiditos es una invención conservadora”, asegura Lucía Lijtmaer. Este grupo neconservador, de actitudes anacrónicas y con un espíritu y un discurso marcadamente contrarreformista enfrenta en el seno de la opinión pública a la marea feminista que ha llegado para quedarse.
A los conservadores les resulta chocante este nuevo mundo, esta nueva mirada y estos nuevos cambios que se van imponiendo poco a poco. “Lo grave es que no arremeten contra el poder, sino contra los ciudadanos que se atreven a cuestionarles“, asegura la autora en declaraciones al diario El País. Y es que los ofendiditos utilizan las redes sociales como campo de batalla para levantar la bandera contra las “feminazis” o el lenguaje inclusivo.
De esta manera, se erigen como los defensores de un sistema arcaico que se desentiende de los cambios que, motorizados a través y gracias a las luchas de cierto segmento de la población, cada vez cobran mayor intensidad.
“El Fiero Analista ofendido no busca otra cosa que recuperar su centralidad perdida en el discurso dominante y reafirmar aquello que conforma el “buen gusto; determinar de qué se habla y de qué no y, sobre todo, cómo se habla de ello. Desde su tribuna, todo lo diverso es histérico, y, por lo tanto, impugnable”, escribe Lijtmaer en su ensayo.
La autora advierte sobre la gravedad de este problema. Estas personas, defensoras de la libertad de expresión en realidad atentan contra ella. En su ensayo, la autora de “Casi nada que ponerte” y “Yo también soy una chica lista”, desenmascara las verdaderas amenazas a la libertad de expresión. Amenazas que no vienen de minorías, feministas u ofendidos, sino del poder político y legislativo. Porque señalar despectivamente al ofendidito no hace sino criminalizar su derecho, el derecho de la sociedad, a la protesta.
El ensayo aún no está disponible en el país, pero se espere que llegue dentro de los próximos meses.
FICHA TÉCNICA:
Título: “Ofendiditos. Sobre la criminalización de la protesta”
Autora: Lucía Lijtmaer
Sinopsis: En los últimos tiempos saltan a la prensa noticias como la censura del cartel de una exposición de Egon Schiele, se genera debate en torno a un cuadro de Balthus o a la Lolita de Nabokov… ¿Nos invade una oleada de neopuritanismo? ¿Se instaura el triunfo de la corrección política? ¿Asistimos a un cambio de paradigma moral, al triunfo de la censura y la autocensura? ¿O acaso lo que se está produciendo es una descalificación y hasta criminalización de la protesta?
Este libro explora las verdaderas amenazas a la libertad de expresión, que no vienen de minorías, feministas u ofendidos, sino del poder político y legislativo. Porque señalar despectivamente al ofendidito no hace sino criminalizar su derecho, nuestro derecho como sociedad, a la protesta.
Editorial: Anagrama