La Cámara Nacional Electoral (CNE), el máximo organismo de la justicia argentina en materia de elecciones, volverá a realizar en las elecciones PASO del 11 de agosto, y en las generales del 27 de octubre, una prueba piloto de comicios por registro biométrico (un dispositivo que captura la huella digital del elector) en ciudades fronterizas de Corrientes, Chaco, Formosa, Jujuy, Misiones y Salta, para tratar de evitar el doble voto fronterizo.
La iniciativa de la justicia electoral va en paralelo con lo que se denomina Operativo Control de Fronteras II -a cargo del gobierno nacional-, para la profundización de los controles en la frontera norte del país mediante el cierre de los diferentes pasos fronterizos no habilitados de la región, a fin de imposibilitar el ingreso y voto ilegal en el país de ciudadanos con doble filiación.
Ese operativo se implementó tanto en las elecciones primarias PASO de agosto como en las legislativas de octubre de 2017, a través de un despliegue en las mesas electorales de dispositivos de control biométrico, provistos por Smartmatic, que tomaron la huella dactilar de los votantes y chequearon si coincidían con las registradas en la base de datos del Registro Nacional de las Personas.
El sistema biométrico, estiman tanto en el Gobierno como en la Justicia, podría ser una solución para ciertos problemas que se presentan en cada elección en las fronteras del país, donde se registran denuncias crecientes en torno a ciudadanos paraguayos o bolivianos que llegan a la Argentina sin estar habilitados para la votación, ya que no tienen residencia y pueden ser objetos de prácticas clientelares