La Cámara Argentina del Libro (CAL) presentó hoy el Informe de Producción del Libro Argentino 2018 y también el correspondiente a los datos del primer trimestre de 2019, en el que da cuenta de un 48 por ciento de producción menos que en 2015 y registra estos tres últimos meses como los peores de los últimos cinco años.
En una conferencia de prensa realizada en la sala de protocolos de La Rural, en el marco de la 45º edición de la Feria del Libro que se desarrolla desde el 25 de abril, Diana Segovia, gerenta de la CAL; Graciela Rosenberg y Martín Gremmelspacher, presidenta y vicepresidente de esa entidad, presentaron ante la prensa la información obtenida a partir de datos que surgen del registro de novedades editoriales declaradas ante la Agencia Argentina de Registro de ISBN.
En las primeras páginas advierten que en 2015 se produjeron 83 millones de ejemplares de nuevos títulos y en 2018 ese número se redujo a 43 millones de ejemplares, lo que da cuenta de ese 48 por ciento de caída para el sector editorial acompañado por un aumento en el valor del papel del casi el 80 por ciento tan solo en 2018, como resultado de la devaluación y la inflación.
Si bien la han hecho siempre, este año la Cámara presentó los resultados de su “Encuesta de Ventas” realizada entre sus socios, en la que siete de cada diez empresas advirtieron que vendieron menos en 2018 que en 2017; además, el 65 por ciento reconoció que tuvieron variaciones negativas en su rentabilidad. Esta caída en las ventas fue registrada por las PyMES a partir de 2016, sin embargo los grandes grupos la explicitaron a partir del año pasado.
Las expectativas de los responsables editoriales consultados marcan que el 29 por ciento sostiene que este año será mucho peor que 2018, y un 39 por ciento prevé que será peor; mientras que al dar cuenta de sus expectativas en relación a sus empresas, un 16 por ciento considera que será mucho peor, y un 27 por ciento, que será peor. Solo un 2 y un 4 por ciento, respectivamente, prevén que el escenario será mejor o mucho mejor.
Las autoridades de la CAL hicieron referencia también a las exportaciones, donde señalaron un pico en 2008, cuando se exportaron libros por un total de 49,1 millones de dólares, y una caída a partir del año siguiente. En el informe detallan que en 2017 se exportaron libros por 26,5 millones de dólares; en 2018, esa cifra ascendió a 30,6 millones. A la hora de hablar de las compras de parte del Estado, expresaron preocupación porque han sido discontinuados los planes y ubicaron a Chile como el país de la región que hoy mantiene mayor continuidad en esa práctica.
Con respecto al libro digital, explicaron que mostró un leve crecimiento para el total de publicaciones respecto a los últimos tres años, ya que entre 2015 y 2017 su producción fue del 17 por ciento y en 2018 llegó al 19 por ciento pero las tres autoridades de la CAL coincidieron en señalar que ese repunte sigue siendo leve porque son muy caros los soportes para la lectura digital en nuestro país.
Tanto Rosenberg como Gremmelspacher y Segovia explicaron que el escenario de crisis en el sector editorial genera mayor concentración de la producción en los grupos más grandes, en detrimento de las PyMES Independientes.
Otro de los datos que se desprenden del informe presentado esta tarde es que las principales temáticas editadas durante 2018 fueron literatura (27 por ciento), Ciencias Sociales (18 por ciento), literatura infantil y juvenil (LIJ, 13 por ciento), Textos y Derecho (7 por ciento), Arte (5 por ciento) y Religión, Economía y Astrología (3 por ciento).
(Con información de Télam)