“La consigna fue mostrar el gran presente artístico argentino, que es muy poderoso, sin caer en esa suerte de mistificación del pasado que suele obturar la valoración del presente. Lo que tenemos para mostrar es muy vital, muy de ruptura”, dice a Télam el ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto.
Desde hace 36 años, la feria organizada por Ifema, que actualmente dirige Carlos Urroz, busca consolidarse como núcleo de descubrimiento de talentos y contenidos para coleccionistas y profesionales.
La llegada de la Argentina como país invitado -con el apoyo de arteBA, institución aliada del Ministerio de Cultura en este proyecto- ocurre en un año en que la feria acentúa la presencia latinoamericana: en esta oportunidad, la mitad de los participantes extranjeros provienen de América latina.
“La presencia será significativa, no sólo habrá artes visuales sino también distintos lenguajes y disciplinas: performance, teatro, cine y música, desde un lenguaje contemporáneo. Incluso la noción misma de ‘argentino’ se llena de sentido con artistas que nacieron y viven acá pero también con artistas que viven en el exterior y con artistas que no nacieron aquí pero se formaron aquí. Argentina no es sólo el territorio sino también los diálogos que llevan y traen distintos creadores desde y hacia afuera”, señala Avelluto.
Desde el miércoles 22, en el área dedicada a la Argentina, dentro de los Pabellones 7 y 9 de Ifema, donde transcurrirá la feria, estarán -convocadas por Inés Katzenstein- las galerías Barro, Cosmocosa, Del Infinito, Vasari, Ruth Benzacar, Nora Fisch, Ignacio Liprandi, Henrique Faria, Jorge Mara, Isla Flotante, Slyzmud y Mite, todas porteñas, cada una con un stand de 40 metros.
Allí el público se encontrará con obras de artistas consagrados como Alberto Greco, Mirtha Dermisache, Alejandro Kuropatwa, Juan José Cambre, Elba Bairón, Kazuya Sakai, Ricardo Carreira, pero también de otros desconocidos en Europa como Diego Bianchi o Sol Pipkin.
En otras secciones de la feria también se encontrarán obras de artistas argentinos representados por galerías extranjeras, como las de Tomás Saraceno, las instalaciones ilusorias de Leandro Erlich o las creaciones de Eduardo Navarro, quien se presentó en la última Bienal de San Pablo con una inmensa tuba que permitía escuchar el sonido de las palmeras.
También, será la oportunidad para encontrarse -por fuera del envio nacional- con la obra de los argentinos David Lamelas, Edgardo Antonio Vigo y Victor Grippo.
Por otra parte, cuatro galerías argentinas ocuparán el sector general de la feria, junto a otras casi 200 de todo el mundo: se trata de Rolf, con una muestra individual de Liliana Maresca, Aldo de Sousa, con esculturas de Enio Iommi, María Calcaterra, con un conjunto de arte óptico y cinético, que incluye a Le Parc y Mrtha Boto, y Document Art.
Si bien la feria abre el miércoles, con acceso a profesionales y coleccionistas, la inauguración oficial será el jueves a las 10 de la mañana (hora española), con la presencia de los reyes de España, Felipe y Leticia, junto al presidente argentino, Mauricio Macri y la primera dama Juliana Awada.
Más de 250 coleccionistas de todo el mundo desembarcarán en ARCO en el marco del programa coleccionistas invitados. La feria tiene un equipo de expertos de los Estados Unidos, Brasil, Francia, Bélgica y España abocados a identificar coleccionistas próximos a los contenidos que ofrece la feria.
El pabellón institucional, diseñado por concurso por el arquitecto rosarino Gerardo Caballero, y llamado a ser el centro neurálgico de la presencia argentina, es una diagonal de color celeste que sobre el fondo blanco de las medianeras forma una estructura dinámica, con paneles articulados que mutan, creando diferentes alternativas espaciales, como reflejo del bullicioso arte argentino contemporáneo.
Allí se realizará el miércoles a las 17.30 una entrevista pública a Julio Le Parc, para conversar sobre su trayectoria, desde sus comienzos en Mendoza hasta su actualidad en Paris. Además, habrá un ciclo de video arte y talleres y performance vinculadas a manifiestos del arte argentino, como la Ciudad Hidroespacial de Gyula Kosice, el Manifiesto Madí, o las construcciones utópicas de Alejandro Xul Solar.
Como una onda expansiva, desde el pasado martes 14 se viene realizando el programa paralelo Argentina Plataforma / ARCO, con curaduría de Sonia Becce y Marcelo Panozzo, que incluye por ejemplo la muestra “Ultramar” con obras de Lucio Fonatana y Guillermo Kuitca en el Museo Thyssen-Bornemisza, obras seleccionadas de la colección del empresario argentino Eduardo Costantini en la Real Academia de San Fernando, Leandro Erlich en Espacio Fundación Telefónica, Nicolás Robbio en La Casa Encendida, y David Lamelas en el Museo Reina Sofía.
Uno de los platos fuertes del programa paralelo, “En el ejercicio de las cosas”, reúne a más de 50 artistas en ocho sedes de la ciudad en diálogo con las exposiciones ya allí desplegadas, donde destacan mesas y ponencias como “La bella sintaxis”, con Pablo Schanton, Alejandro Ros, Alberto Goldenstein, en la sala Bóvedas Conde Duque; “Saber sin mí” en la Tabacalera, con piezas de Nicanor Araoz y Santiago García Saenz; o la muestra “Flotante” en Casa Museo Lope de Vega, con trabajos de Federico Manuel Peralta Ramos, Fernanda Laguna y Lux Lindner.
Habrá, además de arte, literatura, teatro, cine y música argentinos en las calles de Madrid. Por poner un solo ejemplo, en La Casa Encendida, el ciclo de arte y literatura coordinado por Graciela Speranza incluirá una mesa integrada por Fabio Kacero, Patricio Pron y Alan Pauls. Por último, cuatro creadores argentinos junto a cuatro colegas españoles mostrarán el trabajo que están desarrollando en el programa de residencias denominado “El ranchito”.