El abogado de las hijas de Alberto Nisman, Juan Pablo Vigliero, manifestó su satisfacción por la decisión del fiscal Eduardo Taiano de pedir la indagatoria de Diego Lagormarsino y empezar a investigar la muerte del ex titular de la UFI – AMIA como un homicidio.
“Nos sentimos muy satisfechos porque no son pareceres, tenemos pruebas y evidencia científica: Alberto Nisman no se disparó, fue un homicidio”, destacó el letrado, que forma parte del equipo de la querella encabezada por la jueza Sandra Arroyo Salgado, madre de las dos hijas de Nisman.
“Ha sido una tarea titánica”, advirtió Vigliero, que apuntó que se consiguió “después de dos años y seis meses de empujar para dar con el fuero, con el fiscal y con el juez”.
“Siempre se supo, pero ahora podemos decir `la escena del crimen´. Podemos afirmar que se ha asesinado, en tiempos de democracia, a un fiscal que investigaba un hecho de terrorismo, que había denunciado al gobierno anterior”, afirmó el abogado. “La primera contribución ha sido dar vuelta esto”, resumió, en declaraciones radiales, en referencia a que la muerte de Nisman pasó de investigarse como un suicidio a indagarse como un asesinato.
“Lagomarsino solo es un muy buen punto de partida, no es el destino. Hemos comprobado fácticamente que ha habido homicidio. Ahora viene la parte más dura de la investigación, que es establecer motivos y responsabilidades personales”, advirtió Vigliero.
“Esto es una maniobra compleja, que requirió complicidades para entrar a la casa de un fiscal, fuertemente custodiado, con cámaras de seguridad afuera, y que apareció con un tiro en la cabeza”, agregó.
“Estamos hablando de un muerto en un baño. Si la policía, los jueces o los fiscales no pueden con eso, deben renunciar“, concluyó.