El juez federal Ariel Lijo rechazó la recusación planteada en su contra por la defensa de Amado Boudou, a cargo del abogado Eduardo Durañona. Desde el entorno del ex vicepresidente, adelantaron que apelarán la decisión ante la Cámara Federal.
El apartamiento fue planteado en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito, lavado de activos y asociación ilícita, en la que Boudou fue detenido el viernes pasado por posible entorpecimiento de la causa.
La defensa de Boudou recusó al magistrado por “pérdida de imparcialidad”. El ex funcionario de la gestión kirchnerista sostuvo que Lijo ordenó su detención para mostrarse activo tras las acusaciones que recibió en el Consejo de la Magistratura por “cajonear” causas de corrupción.
“El llamado a indagatoria y detención responde a constancias objetivas que surgen de la investigación y no a un hecho aislado como sostiene el imputado y la defensa”, sostuvo el juez, al rechazar el pedido de recusación en su contra, según fuentes judiciales.
El magistrado afirmó que la detención del ex vicepresidente fue resultado de “un análisis de todos los elementos probatorios, de las conclusiones a las que arribó el peritaje, y se aportó recientemente, y al pedido de intimación parcial”.
Boudou también denunció al juez por la divulgación de imágenes del momento en que fue detenido, por considerar que violaron su intimidad.
“Con relación a la filtración de vídeos y fotografías, la única orden del juzgado fue el cumplimiento de la detención y, por esa filtración, el juez ordenó extraer testimonios para que se investigue el hecho”, aclararon las fuentes.
Por otro lado, el fiscal de la causa, Jorge Di Lello, se opuso al pedido de nulidad de la detención presentado por Durañona.
En un dictamen de ocho páginas, le fiscal sostuvo que el juez “tiene facultades directas para evaluar los riesgos procesales a los que aluden las normas y la interpretación que realiza la jurisprudencia”.
(Con información de Télam)