El ex presidente de Brasil y dirigente opositor Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que no respeta el fallo de segunda instancia que ayer lo condenó a doce años y un mes de prisión por corrupción.
“Formaron un cartel para defenderse y no para hacer justicia”, sostuvo da Silva sobre los jueces del Tribunal Regional de Porto Alegre.
La Cámara de Apelaciones rechazó ayer, por unanimidad, la apelación del ex presidente a la condena aplicada por el juez Sérgio Moro el año pasado, en la causa denominada “Operación Lava Jato”. Pero además, amplió la pena de nueve años y medio a doce y un mes.
“Todo partió de una mentira de la Policía Federal de Lava Jato, de otra mentira acusatoria de Lava Jato y del juez Moro. Si respeto esta decisión, pierdo el respeto de mis hijos, de mis nietos y de mis compañeros“, dijo.
Da Silva denunció un “pacto de los medios, el poder judicial y otros resortes del Estado”. “Ayer entendí lo que era un cartel, los jueces actúan como un cartel. Toman decisiones corporativas, cuando uno de los camaristas tuvo seis días para leer el expediente. Hay otras causas en juego por delante, como criminalizar al PT y hacerlo una asociación ilícita”, advirtió.
“Ya no se necesitan a los militares apuntando un cañón contra el Congreso, es todo con los resortes del Estado”, agregó el precandidato presidencial.
Favorito en las encuestas, el precandidato presidencial por el Partido de los Trabajadores (PT) aseguró que busca “recuperar al país”.
“No quiero lanzarme para protegerme, sino para reconstruir el país, mi única protección es mi inocencia”.
Da Silva pidió a los dirigentes aliados “poner al pueblo en movimiento” en caso de una eventual detención. “Les pido que hagan campaña, incluso si ocurre algo indeseable, pongan al pueblo en movimiento”, instó en la sede de la Central Única de Trabajadores (CUT), en San Pablo, ante la dirección partidaria.
“Tenemos el arma más poderosa, que es pedirle todos los días a estos jueces que presenten pruebas, porque lo que están juzgando es el gobierno que hicimos, cuando demostramos que gobernamos mejor que las élites”, instó a la dirigencia del PT.
El dirigente opositor busca participar de las elecciones presidenciales del 7 de octubre próximo.
El Tribunal de Porto Alegre decretó la detención de Lula una vez terminada la serie de presentaciones en la segunda instancia, que se estima entre uno y dos meses.