No nos sorprende que en cuanto una película fuera de Estados Unidos obtiene un gran aplauso de crítica y público, Hollywood se pone rápidamente manos a la obra para hacerse partícipe de ese éxito, y normalmente esto acaba en un remake en inglés del título.
Esto es lo que probablemente suceda con Otra ronda, largometraje danés que obtuvo el Oscar a Mejor película extranjera además de lograr una nominación a Mejor dirección para su responsable Thomas Vinterberg. Como una de las cintas más alabadas del año, al poco de la celebración de los Oscar supimos que ya había planes para adaptarlo, con Leonardo DiCaprio ejerciendo de productor y posible actor protagonista.
Esto significaría que DiCaprio sustituiría a nada menos que al espléndido Mads Mikkelsen, intérprete danés muy querido en Hollywood que tiene planeado ahora mismo aparecer en dos sagas multimillonarias gracias a Animales fantásticos 3 (donde sustituirá al polémico Johnny Depp) e Indiana Jones 5 de James Mangold.
La nueva versión de Otra ronda cuenta, además del propio DiCaprio, con Vinterberg y su coguionista Tobias Lindholm en calidad de productores ejecutivos, y vía Entertainment Weekly ya conocemos la opinión de Mikkelsen sobre este proyecto.
“Siempre es difícil hacer un remake, aunque entienda el porqué”, declaró el actor. “Aunque mucha gente vea la original, no es tan grande. Dicho esto, sí tengo la corazonada de que muchos estadounidenses han visto esta película, y el remake va a ser muy interesante. Hay algunas diferencias culturales con el alcohol de una nación a otra, especialmente entre Dinamarca y Estados Unidos. Todo el mundo se pregunta si no lo enfocarán de forma diferente en Estados Unidos. Tal vez. Tal vez no. Quiero decir que la película trata de abrazar la vida, de reencontrarla. Creo que si lo hacen bien, igual pueden tener cierta libertad en lo referente al alcohol”.
Otra ronda cuenta la crisis de mediana edad de un grupo de profesores que un día deciden hacer un curioso experimento: siguiendo la idea de un filósofo que defiende que todos los seres humanos tenemos un déficit de alcohol en la sangre, prueban seguir ejerciendo su trabajo durante una eterna borrachera. La película reflexiona sobre nuestra ambivalencia hacia el alcohol dentro de unas coordenadas netamente danesas (o europeas), así que habrá que ver cómo se traduce en América.