De Barcelona a la Argentina y de nuestro país a Asia, Manu Chao se mueve por el mundo como uno más. Adonde va, toca y apoya las causas sociales -de derechos humanos, ambientales- que emergen en todo el planeta. Así es como el ex Mano Negra pasó por Indie y Singapur, y llegó a Bangladesh para dar algunas presentaciones que, por la situación sanitaria desatada por el coronavirus, no pudieron hacerse.
Manu Chao ya pudo volver a Barcelona a su estudio repleto de souvenirs futboleros, aunque como todos, está sin poder moverse por las medidas tomadas en el contexto de la pandemia. Y como otros artistas, el músico parisino no se quedó callado: desde sus redes sociales, aporta su granito de arena para atravesar este cuarentena y no bajar el ánimo con un poco de música.
La serie de temas “Coronarictus Smily Killer Sessions” hasta se compone de tres canciones: “Otro Mundo soñé” (una reversión de otro mundo), dos versiones de “Echo de menos”, del español Kiko Veneno y “Mama Perfecta“.
Con simpleza y calidez, Manu Chao le envía al planeta sonidos para olvidar, aunque sea por unos minutos, el frío aislamiento por el coronavirus.