El actor y director Mel Gibson, de 64 años, estuvo internado en un hospital durante una semana en abril por complicaciones relacionadas por el coronavirus pero la especie se conoce ahora a través del representante del artista en una entrevista con la edición australiana del Daily Telegraph, recogida por la agencia Europa Press.
El manager contó que el actor australiano-estadounidense nacionalizado irlandés “estuvo bajo tratamiento con el medicamento remdesivir mientras estaba en un hospital de Los Ángeles, y desde entonces ha dado negativo en numerosas ocasiones, así como positivo por anticuerpos”.
Un trance del que el director de Corazón valiente, Apocalypto o Hasta el último hombre ya está plenamente recuperado, lo que le permite tener en su agenda varios proyectos como actor y director.
Además de estar trabajando en una continuación de su polémica La pasión de Cristo (2004), pretende hacer una remake de La pandilla salvaje, la obra maestra que Sam Peckinpah rodó en 1969.
(Télam)