Miles de brasileños salieron hoy a las calles de varias ciudades para reclamar “justicia” y el esclarecimiento del asesinato de la concejala Marielle Franco, al cumplirse un mes del crimen.
En el centro de Río, incluso, se celebró una misa en memoria de la dirigente del Partido Socialismo y Libertad (Psol), una reconocida activista por los derechos de las mujeres negras y los habitantes de favelas, así como contra los excesos policiales.
Franco fue asesinada a balazos el 14 de marzo pasado en su auto, junto a su chofer, Anderson Gomes.El crimen es investigado bajo estricto secreto sumarial, aunque trascendieron indicios según los cuales pudo ser obra de las llamadas “milicias”, grupos parapoliciales que operan en muchas favelas de Río y disputan el control de esos barrios con narcotraficantes.
Las autoridades confirmaron que las vainas servidas recogidas en el lugar del asesinato corresponden a un lote de municiones adquirido por la Policía Federal en 2006.