Lionel Messi jugará mañana su primer partido de 2018, un año que puede convertirse en el de mayor trascendencia de su carrera profesional si consigue el sueño deportivo que lo desvela: ganar el Mundial de Rusia.
El astro rosarino se presentará con Barcelona, cómodo líder de la Liga de España, en el Camp Nou desde las 12.15 de Argentina frente al modesto Levante, un rival involucrado en la pelea por evitar el descenso.
El contexto se presume muy propicio para que el capitán del seleccionado argentino pueda sostener el ritmo goleador con el que terminó el año pasado y así afianzarse en la tabla de máximos anotadores, que lidera con 15 conquistas en 17 encuentros.
Messi tuvo un 2017 muy prolífico en la red, al marcar 54 tantos en todas las competencias oficiales con Barcelona y la selección, registro que lo ubicó como el segundo futbolista más productivo de todo el planeta.
Después de facturar de penal en el derby con Real Madrid (3-0) en el Santiago Bernabéu, el 23 de diciembre, “Leo” saboreaba el mérito de ser el máximo goleador del año pero el inglés Harry Kane, de Tottenham Hotspur, se despachó con dos tripletes en sus últimos partidos y terminó con 56 festejos.
“La Pulga” jugará cada partido de este año con el deseo latente lograr la consagración mundial con Argentina el 15 de julio en el estadio Luzhnikí de Moscú para quitarse definitivamente la espina de las tres finales perdidas con la “albiceleste”, entre ellas, aquella del Maracaná ante Alemania por la Copa del Mundo Brasil 2014.
Pero además de ese reto supremo, la leyenda de Barcelona de España afrontará previamente el imperativo de recuperar la gloria en Europa con su club, algo que no consigue desde 2015.
En las últimas dos temporadas, la Liga de Campeones quedó en poder del Real Madrid y el portugués Cristiano Ronaldo, por carácter transitivo, le quitó el reinado del fútbol mundial al monopolizar todos los premios individuales al mejor jugador del planeta.
Por esa razón, el argentino, de 30 años, asume 2018 con la convicción de que no será un año más sino la temporada que puede coronar su admirable palmarés personal.
La Liga de España parece tenerla asegurada porque la lidera de forma invicta con 45 puntos y catorce de diferencia respecto de su histórico rival, Real Madrid, que adeuda un partido.
(Con información de Telam)