La dirigente social jujeña Milagro Sala pidió hoy que cese “el hostigamiento judicial” contra ella, su familia y otros dirigentes de la agrupación Tupac Amaru, cuando está a punto de cumplir dos años de prisión a raíz de causas penales por presunta corrupción, entre otras.
Aseguró además que “lo único que encontraron” en el allanamiento realizado esta semana en su domicilio fueron “2 mil pesos en el bolsillo de la campera” de su marido.
“El 16 de enero se cumplen dos años de este hostigamiento judicial”, sostuvo Sala en una entrevista telefónica que concedió a Radio 10 desde su casa en la localidad jujeña de El Carmen, donde cumple arresto domiciliario nuevamente desde el 15 de diciembre pasado.
La dirigente quedó bajo prisión preventiva en causas por el desvío de fondos públicos destinados a la construcción de viviendas sociales, y por tentativa de homicidio calificado y lesiones graves agravadas, en tanto también es investigada por los presuntos delitos de fraude, extorsión y asociación ilícita.
En sus declaraciones a Radio 10, pidió que “alguien pare todo lo que está pasando en Jujuy”, apuntó contra “el hostigamiento” que -según dijo- están “sufriendo continuamente”, y reclamó que “dejen de molestar y apretar como están apretando”.
En este sentido, cuestionó los allanamientos realizados el jueves pasado en una causa que investiga el presunto lavado de activos para establecer la ruta seguida por el dinero desviado de su destino original, que era la construcción de viviendas sociales.
“Si bien dicen que encontraron plata en la casa de Milagro Sala, lo que pasó es que en la campera” de su marido “encontraron 2 mil pesos” y además “sacaron dos motos viejas”, una construida por ella y “la otra es una Gilera que es viejísima”.
Por otro lado, Sala negó vínculos con el empresario de la construcción Guillermo Fiad, cuyo domicilio fue uno de los allanados dentro de la veintena de procedimientos realizados el jueves último.
Desafió a que investiguen a Freddy Morales, hermano del gobernador jujeño,
Gerardo Morales, y actual secretario general de la Gobernación, de quien dijo “tiene una empresa de turismo y le comprábamos pasajes” desde la Tupac Amaru.
“Muchísimos empresarios han trabajado con la Tupac Amaru; entonces, también habría que hacer allanamientos a Freddy Morales”, insistió Sala, quien antes había criticado la supuesta intención de la Justicia de involucrar a su agrupación con un empresario con el que no tienen “nada que ver”, como Guillermo Fiad.