Netflix llegó a un fructífero acuerdo con Ryan Murphy. El célebre showrunner, que encadena series a toda velocidad, ha resuelto explotar su interés por el true crime con el amparo de la plataforma: el mismo que dio pie a las entregas de American Crime Story, y que en cierto momento le llevó a fijarse en la historia de Jeffrey Dahmer. Este temible asesino fue el protagonista de Dahmer, que tuvo un gran éxito en Netflix con el protagonismo de Evan Peters.
La serie arrasó en audiencia, y afrontó el suficiente número de polémicas como para prolongar la conversación más de lo que suele hacer el contenido de Netflix. Hoy Peters bien podría tener presencia en la temporada de premios televisivos mientras ficha por Tron: Ares, y Murphy encuentra la forma de prolongar el fenómeno de Monstruos: Dahmer. Como no podía ser de otro modo en la plataforma de la N roja querían una segunda temporada, pero contaban con el obstáculo de la realidad.
¿Cómo alargar Monstruos: Dahmer? Fácil: manteniendo el título para ocuparse de otros asesinos. Murphy centra ahora sus esfuerzos en la no menos siniestra historia de los hermanos Erik y Lyle Menéndez. Su siguiente proyecto para Netflix es Monstruos: La historia de Erik y Lyle Menéndez. Según Deadline, la serie ya ha encontrado protagonistas para encarnar a los hermanos asesinos.
Estos son por un lado Cooper Koch (visto en la película de terror con Kevin Bacon They/Them) y Nicholas Alexander Chavez (de la comedia Crushed). Son actores bastante menos conocidos de lo que fuera en su día Evan Peters, pero Murphy cuenta con el interés macabro de la historia para atraer a los espectadores. Y es que La historia de Erik y Lyle Menéndez cuenta con la particularidad de que… no ha acabado. El caso ha seguido desarrollándose desde la condena a los hermanos en 1996.
Siete años antes, los Menéndez informaron a la policía de la muerte de sus padres, José y Mary Louis “Kitty” Menéndez. Ambos confesarían el parricidio, pero justificándolo con los abusos psicológicos, físicos y sexuales que sufrían por parte de sus progenitores. El asesinato habría sido, pues, en defensa propia, pero la investigación terminó demostrando que el móvil era la herencia de 14 millones de dólares que recibirían.
Los Menéndez fueron a la cárcel acusados de mentir, y así quedó todo hasta que este mismo año el exmiembro de la banda de música Menudo, Roy Roselló, afirmó haber sufrido abusos por parte de José Menéndez. Con lo que, de pronto, la coartada de los hermanos empezaría a recobrar peso. No se puede descartar que mientras la serie va desarrollándose (sin tener aún estreno fijado en Netflix), el caso no sufra algún que otro giro.