El arquitecto tucumano César Pelli, que murió a los 92 años, deja en su legado rascacielos como las Torres Petronas de Malasia con 452 metros, la torre YPF en Puerto Madero y la embajada estadounidense en Tokio, además de reconocimientos como la medalla de oro del Instituto Estadounidense de Arquitectos.
Pelli fue socio del despacho de Eero Saarinen y posteriormente de Gruen Associates, ejerció como decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Yale entre 1977 y 1984, y vivió en New Haven, Connecticut donde dirigió el estudio Pelli Clarke Pelli.
Su obra más famosa la constituyen las Torres Petronas, en Kuala Lumpur, Malasia, que desde 1998 y hasta mediados de 2003 con 452 metros cada una fueron los edificios más altos del mundo.
El estudio inició con el multipremiado proyecto para la renovación de MoMA de Nueva York y en los años siguientes creció con el World Financial Center y el Winter Garden en Battery Park.
En el 2006 recibió el Premio a la Vida y Obra, galardón otorgado por el Premio Obras Cemex. En 2012 la Fundación Konex le otorgó el Premio Konex de Brillante como la figura más relevante de las Artes Visuales de Argentina de la década.