Montserrat Caballé falleció este sábado en Barcelona a los 85 años tras una brillante carrera de más de medio siglo, en la que deslumbró interpretando a Verdi y Puccini e incluso cantando con Freddie Mercury.Según medios locales, su ingreso en el hospital Sant Pau se debió a problemas de vesícula.
Los servicios funerarios de la capital catalana indicaron que el velatorio de la cantante será este domingo a las 14H00 (12H00 GMT) en el tanatorio de Les Corts. El funeral está previsto el lunes en el mismo lugar a las doce del mediodía.
La cantante catalana se apagó al cabo de una impresionante carrera de más de medio siglo, que le valió ser equiparada a otras divas como la greco-estadounidense María Callas o la italiana Renata Tebaldi.
Compartió escenario con Luciano Pavarotti, Plácido Domingo y José Carreras, de los que era muy cercana, y actuó en los teatros más prestigiosos del mundo, como la Staatsoper de Viena, la Scala de Milán, la Ópera de París, el Covent Garden de Londres, el Bolshoi de Moscú o el Teatro Colón de Buenos Aires.
Los comienzos fueron sin embargo complicados para esta mujer, nacida el 12 de abril de 1933 en Barcelona en una familia muy modesta.Los problemas económicos casi la obligan de muy joven a dejarlo. Pero gracias al mecenazgo de un industrial del sector textil pudo terminar de formarse en el Liceo de Barcelona, que siempre consideró su casa.
Debutó en la ópera de Basilea (Suiza) en 1956 con “La Bohème”, de Giacomo Puccini, y tras vivir dos años en Bremen (Alemania), en 1962 se estrenó con la ópera “Arabella” de Richard Strauss en su querido Liceo de Barcelona.Tres años más tarde conquistó Nueva York cuando tuvo que reemplazar a Marilyn Horne en “Lucrecia Borgia”, de Donizetti.
Montserrat Caballé no se limitó a los estrictos estándares de la ópera. En 1988 sorprendió al mundo grabando junto a Freddie Mercury, el vocalista del grupo de rock británico Queen, el álbum “Barcelona”.El sencillo de ese álbum se convertiría en el himno de los Juegos Olímpicos de 1992 en la capital catalana.
Los últimos años de vida de la cantante se vieron dificultados por sus problemas de salud (un ictus y una conmoción cerebral en 2012 y 2013 respectivamente) y los varios ingresos a los que se vio obligada.
Igualmente tuvo problemas con Hacienda, al reconocer en 2010 haber defraudado más de medio millón de euros, cobrando varios conciertos celebrados en el extranjero a través de una sociedad instrumental domiciliada en Andorra.