En 1981 el emblemático Frank Sinatra visitaba Buenos Aires. Su visita estuvo envuelta en un halo de misterio. La trama oculta de la única y recordada visita a nuestro país del mítico cantante se refleja en el libro “Operación Sinatra”.
La obra también saca a relucir el contexto político, social e histórico que atravesaba la Argentina. Pero eso no es todo, también descubre la injerencia del gobierno de Washington de Ronald Reagan y la dictadura local en este acontecimiento.
Se trata de un trabajo de los periodistas Diego Mancusi y Sebastián Grandi, que describe con precisión los pasos de “La Voz” por nuestro país. Sus históricos shows en el Hotel Sheraton y el Estadio Luna Park. Pero también detallan las negociaciones previas, en donde se entremezclan nombres claves e internas de la dictadura militar.
En ese contexto, también aparece un misterioso mensaje que Reagan le envía al represor Roberto Viola, entonces presidente de facto argentino, a través de Sinatra, quien para ello utiliza como intermediario a Ricardo Finkel, empresario responsable de la visita de “La Voz” junto a Ramón “Palito” Ortega.
Con una buena cantidad de testimonios, el libro cuenta el revés de una historia oficial en donde solo aparece Palito Ortega como responsable del acontecimiento, con su conocido relato sobre el dinero perdido y su posterior resurrección en Miami, gracias a los contactos aportados por el propio Sinatra.
La agencia de noticias Télam dialogó con los escritores de tan magnánima obra.
Mancusi destaca “la aparición de este mensaje que transmite Reagan a Sinatra para Viola y que, finalmente, termina transmitiendo Finkel en persona” como punto bisagra. “La negativa de Finkel a contarnos de qué se trataba y el hecho de que estuviera involucrado Reagan y Viola fue clave. Nos disparó un montón de preguntas que creemos terminaron contestadas en el libro. Eso fue lo que metió la veta política a la historia que disparó para lugares insospechados, como la relación de Sinatra con la CIA”
Las intenciones de los autores estaban claras desde un principio. “Siempre tuvimos en claro que queríamos un relato de no ficción con una estructura literaria, que no terminara siendo una monografía. No dejamos muchos datos afuera. Hay algunos off the record que no se pudieron chequear, pero eran cosas que tenían más que ver con cuestiones privadas que con cosas esenciales de la historia”
Mancusi también hecha luz sobre el procedimiento de investigación que llevaron a cabo a la hora de pergeñar este libro.
“Es cierto que con Finkel tuvimos un vínculo mucho más humano, si se quiere. Palito es una estrella. Conseguir que hablara con nosotros requirió mucho trabajo. Él, más que responder pregunta, nos contó su versión oficial. Con Finkel la cosa fue más llana. De todas maneras, lo que hicimos fue chequear lo que decía uno con lo que decía el otro, y también con el archivo. Por ejemplo, Palito nos dijo que era mentira que Sinatra había salido del hotel, que no se había reunido en Olivos con Viola, lo cual no fue así. Hay fotos que lo prueban y también lo confirmó Víctor Bugge, el fotógrafo presidencial. De todas maneras, el libro no es la versión de Finkel, en el sentido de que todo fue debidamente chequeado”
FICHA TÉCNICA:
Título: “Operación Sinatra”
Autores: Diego Mancusi y Sebastián Grandi
Sinopsis: La historia recuerda a Palito Ortega como el único gestor de la visita de Frank Sinatra a la Argentina. Sin embargo, existió otro protagonista: Ricardo Finkel, quien en esta investigación ofrece su versión de los hechos y cuenta cuál fue el verdadero rol de Palito en el viaje de La Voz al país, más allá de las presentaciones en el Sheraton Hotel y el Luna Park.
¿Cómo fueron las negociaciones?. ¿Era Sinatra un agente de la CIA? .¿Trajo un mensaje del presidente Ronald Reagan para el gobierno de facto argentino? .¿Quiénes eran las únicas personas que podían llamar directamente a su habitación?. ¿Cómo engañaron los técnicos argentinos a los del cantante?. ¿Amalita Fortabat colaboró económicamente?. ¿Por qué Palito pidió ayuda al poder de turno?. ¿Quiénes participaron en el festival anti-Sinatra?. Todo el backstage de una visita que fue mucho más que una serie de recitales del más grande de todos los tiempos.
Editorial: Aguilar
{Con información de Télam}