Pérdida de visión, ojo rojo, fotofobia y dolor en el globo ocular son algunos de los síntomas de uveítis, una enfermedad poco frecuente, infecciosa o autoinmune que afecta a la visión y si no es tratada a tiempo puede traer “cataratas, glaucoma e incluso ceguera”, alertaron especialistas.
La uveítis es una inflamación de la parte interna del ojo que causa malestar y dolor. Existen dos grandes grupos: las uveítis infecciosas y las autoinmunes (o no infecciosas). Dependiendo de a qué parte interna del ojo afecten, se subdividen además en anterior, intermedia, posterior y panuveítis.
“Pese a que las molestias del ojo son fácilmente reconocibles, la consulta a veces no es inmediata, lo que retarda el inicio del tratamiento cuando la inflamación ya está avanzada”, explicó Pablo Franco, jefe del Servicio de Uveítis del Hospital Oftalmológico Santa Lucía y Jefe del Grupo Argentino de Uveítis (GAU).
El especialista señaló que los síntomas “pueden confundirse con otras molestias, como ojo seco, conjuntivitis o cansancio“, lo que “muchas veces” retrasa el contacto con el médico.
“Si la enfermedad se diagnostica inmediatamente, hay mejores posibilidades de tratarla. El tratamiento correcto, más allá de reducir molestias y dolores, evita la recurrencia y eso es fundamental para evitar mayores complicaciones a futuro“, aseguró.
(Fuente Telam)