El fiscal de juicio Abel Córdoba pidió la detención de Martín Báez, hijo del empresario Lázaro, por violar un embargo e inhibición judicial en el marco de la causa conocida como la “ruta del dinero k”, por la cual lograron fugar cinco millones y medio de dólares de cuentas en el exterior.
El pedido del fiscal se produjo al conocer información clave aportada por la Unidad de Información Financiera (UIF) y mientras estaba en curso el juicio contra Báez y sus cuatro hijos.
El Tribunal Oral Federal Nº 4 intimó a Martín Báez a que se presente antes de finalizar la audiencia del juicio que se lleva adelante por la denominada causa de la “ruta del dinero k”, caso contrario dispondrá su detención.
Al advertir la ausencia de Báez en la sala de juicio donde se reanudó el debate, el presidente del tribunal, Guillermo Costabel, intimó a través de uno de sus abogados a que se presente o será detenido.
Sobre Martín Báez pesaba un emargo de 10.500.000.000 millones de pesos pese a lo cual continuó “con la articulación y ejecución remota de complejas y millonarias maniobras” según la fiscalía.
Todo se originó a partir del informe otorgado por la UIF en el que detectó que habían 3.050.918 de euros en la cuenta 590201 del Banco CBH LTD de Bahamas, fondos que ya fueron bloqueados.
La cuenta bancaria correspondería a firma EASTERN SHORELINE LIMITED cuyos beneficiarios finales serían los acusados Martín, Luciana, Leandro y Melina Báez, y ese dinero provenía de cuentas de la firma KINSKI SA.
El 25 de febrero de 2015, Martín Báez suscribió en representación de la empresa Kinski S.A la apertura de la cuenta 579484 en el Banco CBH LDT de Bahamas.
A los pocos meses, esa cuenta recibe del Banco Safra Sarasin, la suma de 10.399.975 de dólares de la cuenta 608663 cuya titularidad era de la Foundation Kinsky, cuyos beneficiarios eran los cuatro hijos de Báez.
Luego, a fines de 2015 y por gestiones de Ahmad Strachan y y Úrsula Rolle se abre en el Banco CBH LTD de Bahamas la cuenta 590201 a nombre de la sociedad Eastern Shoreline Limited, creada en el mismo país.
Como beneficiario de dicha cuenta, se señalará a Artincom International Trading Corp, , sociedad creada en la República de Islas Marshall.
Esta última cuenta recibe los más de 10 millones de dólares que previamente estaban depositados en la número 579484 de Kinski S.A.
en el mismo banco, y luego se crea en esa misma entidad la subcuenta 590207.
La cuenta 590201, según documentación reciente, registra movimientos en dólares hasta el 2 de agosto pasado y de euros hasta julio.
Además, las dos cuentas últimas registradas en el CBH LTD de Bahamas figura Martín Báez como “beneficial owner” y la propia entidad bancaria direccionó su actividad dirigida a conocer a su cliente hacia el hijo mayor de Lázaro.
En el hallazgo de la UIF, se detectó el anio pasado unos 2, 981,646.12 de euros en la cuenta 590201 y unos 1,009,391.16 en la subcuenta 590207, siendo un total de 3.991.037 de euros: en el camino, evalúan los investigadores, se fugaron unos 5,5 millones de dólares de los más de 10 iniciales.
“Ha sido Martín Báez quien a la luz de un análisis de dominio de los hechos surge con un protagonismo mayor, evidenciado sobre todo en la suscripción personal de documentos que instrumentan órdenes en el plano societario y financiero que se traducen en disposición de fondos de origen ilícito, en abierta disputa con las decisiones jurisdiccionales dictadas”, sostuvo el fiscal Córdoba al solicitar la detención.
Por ello, el fiscal refiere a “riesgo procesal” al estar en libertad Martín Báez y que las operaciones bancarias fueron “encabezadas” por él “y desarrolladas en el ámbito de la estructura societaria montada para contener y direccionar fondos de fuente ilícita, originalmente provenientes de la actividad ilícita” de su padre. Si bien Leandro Báez también tuvo participación, para el fiscal fue menor y por ello había pedido que se le imponga la obligación de no ausentarse por más de 24 horas de su domicilio y la obligación de presentarse periódicamente ante el Tribunal.