El presidente de Chile, Sebastián Piñera, anunció hoy una serie de diez medidas, centradas en fortalecer el orden público y resguardar la seguridad ciudadana, pero no hizo referencia a una posible reforma constitucional, como exigen gran parte de la oposición chilena y miles de personas en las calles desde hace tres semanas.
“Estamos convencidos de que esta agenda representa y constituye un aporte significativo e importante a mejorar nuestra capacidad de controlar y resguardar el orden público y proteger la seguridad ciudadana”, dijo Piñera en una conferencia de prensa en el Palacio de la Moneda. Antes de enunciar las nuevas medidas de seguridad, el mandatario repasó la “agenda social” tomada por su gobierno desde el estallido de las protestas, como el aumento de las jubilaciones y el salario mínimo.
Acompañado de su flamante ministro de Interior, Gonzalo Blumel, Piñera describió los diez puntos de su nueva agenda de seguridad, cuyas propuestas discutió y elaboró en los últimos días con su coalición de gobierno de centroderecha.
Con estas medidas, el gobierno da urgencia a una serie de proyectos para recuperar el control de las calles, como el de la ley anti-saqueos, la ley de anti-encapuchados y otro que crearía la figura penal de aquellos que bloquean las calles y avenidas con barricadas. Asimismo, Piñera anunció la creación de un equipo especial de abogados y de otro compuesto por la Fiscalía, Carabineros y la Policía de Investigaciones para mejorar los trabajos de inteligencia y la atención de denuncias.
El presidente anunció también el tratamiento de tres proyectos legislativos centrados en las fuerzas de seguridad del Estado: uno para crear un estatuto de protección, otro para modernizar el sistema de inteligencia y un tercero para modernizar a la Policía.
Con el anuncio de esta nueva agenda de seguridad, el gobierno de Piñera pone el eje en la seguridad para recuperar la paz social y vuelve a evitar hablar sobre el cada vez más masivo debate sobre la necesidad de una reforma constitucional.
Según una reciente encuesta de la consultora Cadem, 87 por ciento de los chilenos quiere reformar la Constitución. Piñera, sin embargo, se concentró hoy solamente en promesas vinculadas a la seguridad. El mandatario anunció que esta tarde se reunirá con el consejo de Seguridad Nacional, que cuenta con representación de todos los poderes del Estado, en la Moneda. “Para poder recibir la colaboración y el compromiso de todos para que Chile pueda superar estas difíciles tres semanas y reencontrarnos con la paz social, progreso y la unidad entre todos chilenos”, concluyó.
La Constitución vigente en Chile fue sancionada en 1980 y desde entonces, hasta 2017, fue objeto de una veintena de reformas. (Télam)