Si bien no manifestó una postura expresa sobre el proyecto que legaliza la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) “por el debido respeto que merecen las convicciones personales”, la Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió sobre “el impacto que la inflación imprime sobre las economías de las obras sociales”.
“Esta Confederación viene gestionando y alertando al Poder Ejecutivo Nacional y a los ministerios de Trabajo y de Salud sobre el impacto que la inflación descontrolada imprime sobre las economías de las obras sociales, afectando de manera directa en la compra de insumos, la contratación y pago a prestadores; “, apuntó, la CGT en un comunicado.
La central obrera advirtió también sobre “los altísimos costos que generan algunos fallos judiciales que obligan a las instituciones a cumplir con procedimientos experimentales, lo cuales motivaron la necesidad de creación de la AGNET (Agencia de Evaluación de Tecnologías de Salud)”.
Según la iniciativa para legalizar el aborto, el sector público de la salud, las obras sociales y las entidades y agentes privados “deben incorporar la cobertura integral de la interrupción voluntaria del embarazo en todas las formas que la Organización Mundial de la Salud recomienda” y quedarán incluidas en el Programa Médico Obligatorio.
La propuesta, con media sanción de la Cámara de Diputados desde el 14 de junio, se tratará en el Senado el 8 de agosto, según el acuerdo de todos los bloques
“La Confederación General del Trabajo de la República Argentina comunica que en el marco del tratamiento de la Ley de Interrupción Voluntaria de Embarazo, esta Central, hasta el momento y tampoco en el futuro, manifestará una posición institucional sobre el tema por el debido respeto que merecen las convicciones personales, creencias y/o de culto que cada representantes del Consejo Directivo, de sus Gremios Confederados y afiliados representados que esta Confederación posee”, indicó el comunicado de la CGT.
“La discusión que actualmente se está dando sobre el aborto toca una fibra tan sensible para la sociedad, que excede a la representación colectiva de los trabajadores”, agregó y consideró que resultaría “demagógico y poco democrático esbozar una postura que, a las claras, no reflejaría de manera uniforme la visión de cada uno de los integrantes de esta Central”.
“Por ese motivo, acompañaremos la decisión que derive de la votación en el ámbito del Congreso Nacional”, concluyó.
Los miembros de la central sindical, conducida por Juan Carlos Schmid, Carlos Acuña y Héctor Dáer, manifestaron distintas posiciones con respecto al proyecto.