Tres años después de que tuviéramos oportunidad de verlo por última vez como Kylo Ren en The Rise of Skywalker, Adam Driver vuelve a la ciencia-ficción, pero en esta ocasión en una producción de presupuesto mucho más modesto que lleva el enigmático y escueto título de 65.
Dirigido por Scott Beck y Bryan Woods, conocidos sobre todo por ser los guionistas, junto a John Krasinski, de Un lugar en silencio y secuela, también han recurrido para su labor tras las cámaras a un guion escrito por ambos. Y entre los principales avaladores tenemos a Sam Raimi ejerciendo como productor.
Adam Driver, uno de los actores más solicitados, sea en blockbusters o en el cine indie, que ha trabajado a las órdenes de directores como Noah Baumbach, Jim Jarmusch, Leos Carax o Scorsese, interpreta en esta ocasión un astronauta cuya nave colisiona contra un extraño planeta. Allí descubrirá otros humanos, como una niña de 9 años que habla otro lenguaje, y deberá hacer frente una poderosa amenaza. ¿Cuál?
Las sinopsis oficiales no revelan demasiado más, pero el proyecto se ha ido relacionando con una historia en la que podría haber dinosaurios, y de hecho el mismo título de 65 podría ser una referencia a los millones de años que hace que se extinguieron los prehistóricos reptiles, al final de Cretácico.
Y después del tiempo que la película lleva esperando ver la luz en cines, o en streaming, con varias fechas de estreno pospuestas (las primeras para marzo o abril de este mismo 2022), finalmente Sony ha lanzado el primer tráiler, junto con la fecha de estreno, de momento solo confirmada para Estados Unidos, prevista para el 10 de marzo de 2023 y en cines.