El juez federal Sebastián Casanello procesó por “cohecho” al detenido ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido en la causa en la que se investiga el cobro de sobornos en la licitación para la construcción de dos plantas potabilizadoras de AySA, adjudicada a la constructora brasileña Odebrecht.
Además, quedó procesado el empresario Jorge “Corcho” Rodríguez como “partícipe necesario” del pago de las coimas a Odebrecht
De Vido está detenido desde octubre del año pasado en el penal de Ezeiza, luego de que la Cámara de Diputados votara a favor de su desafuero y los suspendiera como diputado nacional, en el marco de la causa en la que está procesado por el desvío de fondos públicos destinados a Yacimientos Pertrolíferos Río Turbio (YPRT).
El magistrado también procesó por “cohecho pasivo” a los ex funcionarios de la gestión kirchnerista Roberto Baratta, José López, Carlos Ben y Raúl Binacuzzo, los dos últimos formaban parte de la dirección de AySA.
Casanello los procesó por considerar que recibieron sobornos de los empresarios a los que se les adjudicaron las obras y que ya estaban procesados por defraudación. Hoy, además, los procesó por cohecho activo.
La licitación investigada es la que se llevó a cabo para la construcción de la planta Paraná de las Palmas, adjudicada a unión transitoria de empresas formada por Odebrecht y por Benito Roggio e Hijos, Supercemento SAIC y José Cartellone Construcciones Civiles SA. La otra fue la de la obra del Bicentenario, que quedó a cargo de la empresa brasileña Camargo Correa, que conformó una sociedad con la argentina Esuco S.A., del ex presidente de la Cámara de la Construcción Carlos Wagner.