El ex presidente catalán Carles Puigdemont y los cuatro ex consejeros destituidos que se refugiaron con él en Bruselas anunciaron hoy la creación de una “estructura estable” para coordinar la acción del gobierno “legítimo” de Cataluña desde el “exilio”.
“Toca ahuyentar de las instituciones a aquellos que han querido hacerlas suyas con un golpe de Estado”, escribió Puigdemont en Twitter, adjuntando una misiva dirigida a los catalanes con el título “Carta desde Bélgica”. Puigdemont y sus ex consejeros Toni Comín, Meritxell Serret, Clara Ponsatí y Lluís Puig subrayaron que están afrontando una situación “impensable en un entorno democrático”, a raíz de las medidas de intervención del gobierno español de Mariano Rajoy en la región. También denunciaron que el encarcelamiento de miembros de su gobierno destituido, el cierre del Parlamento catalán y la amenaza de prisión para otros ex parlamentarios es “claramente contraria al Estado de Derecho y el ordenamiento de la Unión Europea”.
“El Estado (español) activó una estrategia desesperada y extrema ante la firmeza democrática de los catalanes”, aseguró Puigdemont. Para hacer frente a esta situación, dijo que desde Bruselas “el gobierno legítimo de Cataluña” se reorganizará en una “estructura estable”, que pondrá en marcha para coordinar sus acciones tendientes a denunciar ante las instituciones internacionales la “politización de la Justicia española” y las carencias democráticas del Estado español.
A su vez, a los independentistas catalanes les pidió una “combinación eficaz de coraje, firmeza, de indignación” para ganar el combate a un Estado español “enloquecido y descontrolado”. La “hoja de ruta” para los próximos días y semanas, según Puigdemont, pasa por “defender la democracia” frente a la “coalición que ejecutó el 155”, en referencia a los conservadores del Partido Popular (PP) de Rajoy, los liberales de Ciudadanos y el Partido Socialista (PSOE) que respaldó la intervención en Cataluña para frenar la secesión. “Defenderemos la democracia votando, como lo hemos hecho siempre”, anunció el líder secesionista.
Puigdemont planteó las elecciones del 21 de diciembre, convocadas por el presidente del gobierno español Mariano Rajoy, “como un reto para recuperar la plena democracia sin presos, sin venganzas, sin imposiciones, sin furia y llena de futuro, de diálogo y de acuerdo”. Lograr la liberación de los consejeros cesados “secuestrados” y de los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sànchez, y de Òmnium, Jordi Cuixart, es otro de sus objetivos, por lo que instó a los catalanes a mantener el ánimo y a no quedarse inmóviles ante el sufrimiento de los familiares y conocidos de los presos. “Representan, en este momento, vuestra dignidad individual y colectiva”, sostuvo, y pidió que se participe en la manifestación prevista para el sábado en Barcelona contra el encarcelamiento de los líderes independentistas.
“El tiempo que pasaremos entre rejas o en el exilio no será en vano si estamos unidos más que nunca en la defensa de Cataluña y en la denuncia de la decadencia democrática del Estado español”, dijo el ex presidente. Además, Puigdemont, que la semana próxima deberá declarar en Bruselas en el marco del proceso de extradición en su contra, rechazó “los abusos que ha tolerado la Unión Europea, incluso amparando de manera vergonzosa, las actuaciones represivas españolas”.
La jueza de la Audiencia Nacional de España Carmen Lamela reclamó a Bélgica la detención y entrega de Puigdemont y los cuatro ex consejeros por delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos, que conllevan graves penas de prisión.
(Télam)