“Lo discutiremos en el Confederal. Me atengo a lo que anuncié porque debe ser una responsabilidad colectiva”, alegó Juan Carlos Schmid , quien aseguró que “habrá que escuchar las opiniones porque no puede ser que le descarguen toda la responsabilidad al triunvirato sabiendo que llegamos para unificar”.
Según su visión, “las razones de la agenda social están intactas, y creo que son razones de peso para protestar”.
No obstante, el líder del gremio de Dragado y Balizamiento, planteó que lo que se requiere “más allá de la protesta que surge en la base, que muchas veces no tiene toda la información de la conducción, es el armado de una estrategia porque el gobierno va a estar dos años más”. Por lo tanto, el dirigente sindical abogó por “armar una serie de acciones que nos permitan encontrar una alternativa frente a todo eso, porque si hacemos todas las protestas y se termina votando como se vota, no se puede cargar la romana a la central obrera”.
En una entrevista publicada hoy en el diario Página 12, Schmid evaluó sobre la movilización realizada el 22 de agosto en contra del modelo económico del gobierno: “Desde el punto de vista de una central obrera, se demostró que somos un actor de peso en la política argentina”. “Muchos señalan que esto es político y claro que es así porque es una manifestación de un sector de la sociedad. Fue un signo vital de la CGT con toda la dificultad que tiene”, analizó.
Sobre el resultado electoral de las PASO, juzgó que el oficialismo “hace muy mal en sentirse envalentonado”, y señaló que “a este y a cualquier gobierno le debería preocupar que el conflicto le vaya ganando la calle más allá del proceso electoral”.
“Nadie está desconociendo que hay un núcleo importante de la sociedad que le ha dado un espaldarazo. Eso no se puede ignorar pero los problemas sociales están a la orden del día”, afirmó, y citó tres ejemplos: “los jubilados no llegan a fin de mes, la caída del consumo y los bajos salarios; se puede afirmar que uno de cada tres argentinos tampoco llega a fin de mes. Y por último, la intervención de los sindicatos”.
(DyN)