o miembro de la familia real asistirá al Mundial de Fútbol de Rusia, que comienza en junio próximo. “Muchos de nosotros miramos a la Rusia post-soviética con esperanza. Queríamos una mejor relación y es trágico que el presidente Putin haya elegido actuar así”, dijo la primera ministra británica, Theresa May, ante el Parlamento. Las sanciones que anunció incluyen la cancelación de una visita del canciller ruso, Serguei Lavrov, a Londres.
Rusia exige que Londres se dirija oficialmente a Moscú según las normas internacionales y que se lleve a cabo una investigación conjunta del caso tal como requiere la organización mundial para la prohibición de las armas químicas (OPAQ).
Rusia respondió taxativamente que no tiene relación alguna con el envenenamiento, que la posición de Moscú era conocida y fue comunicada a Londres “por los canales diplomáticos”, además de calificar de “inaceptables las acusaciones sin pruebas” y advertir que “no acepta el lenguaje de ultimátum”.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, expersó hoy su “total solidaridad” con May, “a la vista del brutal ataque, que fue inspirado, lo más probable, por Moscú”.
Paralelamente, la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) mostró su preocupación y solidaridad con el Reino Unido durante una sesión de la alianza atlántica sobre las investigaciones del ataque con un agente nervioso contra el ex espía.