Autoridades de la Conmebol inspeccionarán esta mediodía la Bombonera para examinar el estado del campo de juego y tomar la decisión de si se disputará el partido Boca-River, por la ida de la final de la Copa Libertadores.
Desde la entidad que rige los destinos del fútbol sudamericano, los veedores estarán a las 13 en la cancha y, luego de recorrerla, definirán los pasos a seguir.
El Servicio Meteorológico Nacional aseguró hoy que espera un mejoramiento temporario de las condiciones meteorológicas, aunque con posibles lluvias y chaparrones aislados, durante la tarde de este sábado cuando se juegue el primer partido de la final de la Copa Libertadores.
“Las tormentas fuertes continuarán hasta pasado el mediodía y luego se espera un mejoramiento temporario aunque a la hora del partido podría haber algunas lluvias o chaparrones aislados”, afirmó el meteorólogo Juan Berengua del SMN.
Decenas de fanáticos circulaban por la calle Brandsen en dirección al estadio, vestidos la mayoría de ellos con ropa plástica para defenderse de una lluvia que desde las 7 registró lapsos de gran intensidad.Las inmediaciones del estadio presentaban sectores con mucha agua acumulada, lo que impedía la normal circulación del público hacia La Bombonera.
Ariel Pereyra, ayudante de campo de Guillermo Barros Schelotto, y Juan José Romero, entrenador de arqueros, también pisaron el césped y se llevaron la misma impresión que los miembros de la entidad continental.De momento, el partido está programado para las 17 con arbitraje del chileno Roberto Tobar y el operativo de seguridad se activó a las 8.30.