El secretario de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, sostuvo que “la fuente” del conflicto que recrudeció en el Hospital Nacional Posadas la semana pasada, tras el despido de alrededor de 50 médicos y profesionales, es el control de asistencia que se implementó en marzo de este año.
“El Hospital Posadas ha sido muy complicado y muy politizado y, a partir de esta gestión, empezó a normalizarse y eso es lo que pasó en los últimos dos años y medio”, sostuvo el funcionario, con respecto a los más de 300 despidos que se produjeron en el centro de salud ubicado en la localidad bonaerense del El Palomar, desde el año pasado.
“Era un hospital con cierto grado de conflicto, pero que se agravó en los últimos años. La fuente de conflicto de ahora es que en marzo empezó a ponerse el sistema biométrico de asistencia, la huella digital”, apuntó Rubinstein, en declaraciones a radio Mitre.
El secretario de Salud aseguró que se detectaron profesionales que cumplían el “10 por ciento de las horas que corresponden”. No obstante, el funcionario admitió que “se están revisando” algunos de los despidos de las últimas semanas.
“Lo que ocurrió en estos 50 casos es que se les envió a los profesionales preavisos para que hicieran su descargo, porque figuraban con 10 por ciento de las horas que corresponden. De lo que se trata es de ordenar un poco las cosas. Por supuesto hubo casos excepcionales, que se están revisando. Pero hay otros casos que son demasiado flagrantes, lo que es un daño a la salud pública”, advirtió Rubinstein.
El secretario de Salud aseguró que “la mayoría” de los despidos de médicos y profesionales “son flagrantes” y que las más de 100 cesantías que se produjeron en marzo tuvieron con ver con contrataciones irregulares.
“No hay ninguna intención de achicar la estructura del Posadas. Lo que ocurrió en marzo es que se discontinuaron contratos que no estaban rubricados. No hay intención de achicar ninguna estructura, lo que sí hay es un ordenamiento”, explicó Rubinstein.
Sobre la renuncia del jefe del Equipo de Cirugía Cardiovascular Infantil, Christian Kreutzer, en rechazo a los despidos de médicos y profesionales, el funcionario aseguró que su servicio “sigue funcionando”.
“No conozco al doctor Kreutzer, lo que sí entiendo es que su servicio sigue operando. Entiendo que puede tener sus razones para renunciar, pero el servicio está funcionando y trabaja en otros lados. Se le pidió que aumente su productividad”, explicó.