Gabriel Torres, gerente de la agencia Moody’s en Nueva York, pronosticó que la recesión económica que la Argentina podría extenderse hasta 2020.
“Han tomado la decisión de consolidar lo fiscal, que es positivo para el crédito, pero esto tiene un costo económico y político”, advirtió el analista de la agencia de calificación estadounidense sobre la situación argentina.
La gestión de Mauricio Macri corrigió la estimación de crecimiento de este año hacia abajo, a 2,4 por ciento, y la de inflación la elevó a 42 por ciento.
El gobierno prevé 2019 transitará sin crecimiento y con un alza de precios del 25 por ciento.
“La caída va a ser mucho más fuerte de lo que se dice. Creemos, será del 3 por ciento este año”, advirtió Torres, durante una conversación con inversores sobre la proyecciones de Moody´s sobre Argentina.
“Si bien no tenemos un modelo, el año próximo va a haber caída. Vas a tener una corriente algo negativa por lo fiscal y las tasas altas, que no van a bajar. Lo bueno será la cosecha. Veremos de cuánto es la caída en 2019”, agregó el analista.
Moody´s publicó un análisis el lunes último, en el que previó que la revisión del acuerdo cerrado en junio con el Fondo Monetario Internacional (FMI) conllevará medidas como mayores tasas de interés y políticas fiscales más restrictivas, “que amenazan con sumir a la economía en una profunda recesión”.
Torres consideró que la suba de la tasa de referencia a 60 por ciento fue la última de una serie de medidas que “han sido insuficientes para restablecer la confianza de los inversores”.
El analista de Moody´s destacó que, desde el levantamiento de los controles de capitales en diciembre 2015, Argentina recibió alrededor de 85.000 millones de dólares en flujos netos de cartera, casi el doble que México.
“Los flujos de cartera caros exponen a la moneda argentina, especialmente en un entorno en el que los participantes del mercado perciben que las perspectivas de Argentina son cada vez más riesgosas”, explicó.