El rey del terror regresa a las librerías de todo el país con una nueva y escalofriante historia. Stephen King esta de vuelta, esta vez unió su magistral pluma a la de Richard Chizmar para crear “La caja de botones de Gwendy”, una novela ambientada en el pueblo ficticio de Castle Rock.
La pequeña ciudad de Castle Rock, en Maine, ha sido testigo de algunos extraños sucesos, pero solo hay una historia que no se ha contado… hasta ahora.
Existen tres vías para llegar a Castle View desde la ciudad de Castle Rock: por la carretera 117, por Pleasant Road y por las Escaleras de los Suicidios. Cada día del verano de 1974, Gwendy Peterson, de doce años de edad, toma el camino de las escaleras, que ascienden en zigzag por la ladera rocosa.
Pero una mañana, al llegar a lo alto, mientras recupera el aliento con la cara roja y las manos apoyadas sobre las rodillas, un desconocido la llama. Allí, en un banco a la sombra, se sienta un hombre con una chaqueta negra y un pequeño sombrero. Llegará un día en el que Gwendy sufra pesadillas con ese sombrero.
En menos de 200 páginas, el dueto logra construir una historia atrapante que se lee de una sentada. El “constant reader” -como se conoce en la comunidad al lector de King de larga data- encontrará en esta novela un sinfín de guiños y alusiones a los libros previos del autor. Plagada de referencias al universo creado por King, esta novela surgió cuando el autor estadounidense le envío un correo electrónico a su colega Richard Chizmar: “tengo esta historia pero no sé como terminarla, haz con esto lo que te de la gana”.
Una vez más la habilidad de Stephen King para crear niños protagonistas reales y multifacéticos, con un sinfín de conflictos y cosas por aprender brilla en todo su esplendor en “La caja de botones de Gwendy”.
FICHA TÉCNICA:
Título: “La caja de botones de Gwendy”
Autores: Stephen King y Richard Chizmar
Editorial: Suma de letras